Seguro has escuchado la frase “tener un hambre de perro”, porque la gran mayoría de los perros parece tener un hambre infinita, pues aunque acaben de comer, pueden volver a hacerlo, aunque al final queden con una gran bola en la panza, como una cuerda con un nudo en medio, por eso debes cuidar muy bien la alimentación de tu amigo peludo para que tenga las mejores salud y bienestar posibles.
Factores
Tanto el peso como el tamaño de un perro son factores determinantes para conocer las necesidades alimenticias del sabueso.
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¿Cuántas comidas al día debes darle?
Además de la cantidad y tipo de comida, es muy importante la frecuencia, si quieres que tu can tenga una digestión saludable.
Aparte de la cantidad y la composición de la comida, la frecuencia con la que das de comer a tu perro también es importante a tener en cuenta si quieres que tenga unas digestiones saludables. Aquí tienes unos cuantos consejos.
Lo mejor es darle de comer a tu perro entre una y tres veces, dependiendo de su actividad física y metabolismo.
Una vez al día: se aconseja para perros con alto desgaste físico. Una sola comida diaria les ayuda en su actividad diaria. Se recomienda darles de comer después de su ejercicio para que no tengan problemas de salud o dificultad con su digestión.
Dos veces al día: la mayoría de los sabuesos adultos deben comer dos veces al día en dos raciones, de forma que su cuerpo regule la energía que necesite.
Entre tres y cuatro veces al día: los canes que suelen tener tendencia al sobrepeso deben comer en tres o cuatro raciones diarias, pues así metabolizan mejor la comida y pierden peso a largo plazo. Darle más veces de comer no significa darle más, sino repartir la misma cantidad en pequeñas raciones.
Por último, se aconseja no dejar la comida a disposición del perro, pues por lo general se exceden y se “atascan”, lo que les puede generar malestar y problemas de digestión.