Para las autoridades sanitarias, la proliferación de perros callejeros en abandono es un problema de salud en aumento, pues además del constante incremento de la población canina, en temporada de calor se enfrentan a la propagación de las garrapatas, y el riesgo de padecer rickettsia, que ya se ha tenido en la ciudad en años pasados.
Se estima que en Nuevo Laredo hay cerca de 47 mil, de los cuales más del 53 por ciento, es decir, aproximadamente 25 mil son callejeros, según estimaciones del Centro Antirrábico y de Atención Canina en la ciudad, pero este panorama no siempre fue así, sino que se ha ido incrementando.
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“Antes teníamos un perro por cada nueve habitantes y esto se ha superado en gran medida, porque ya tenemos 10 años en los que no levantamos perros, y esto nos crea un serio problema de salud pública”, expresó dijo Juan Antonio Salinas Aguilera, director del Centro Antirrábico de Nuevo Laredo.
El abandono de mascotas no solo es una irresponsabilidad sino una baja cultura, ya que siempre los compran para regalo, pero no toman en cuenta que crecen y al ya no ser cachorros, ya no los quieren, los sacan a la calle y es ahí donde se da el problema. A esto se le suma que las hembras entran en celo dos veces al año y según el tamaño del animal son los cachorros que tiene, algunas llegan a tener hasta cinco perros por camada.
ENFERMEDADES
Sin embargo, no solo es la proliferación animal sino las enfermedades que pueden transmitirse al humano como la sarna, la rickettsia entre otras, así como el orín y las heces fecales que desencadenan enfermedades como la giardiasis, salmonelosis, toxoplasmosis, parasitosis, y la más grave: leptospirosis, con similitudes a las antes mencionadas, es una enfermedad infecciosa causada por bacterias que pueden producir infecciones de los riñones potencialmente mortales.
AGRESIONES
Durante julio se registraron al menos una docena de agresiones de perros a humanos, pero la gran mayoría de estas se da por las mascotas de casa, pues usualmente se trata de perros que se encuentran amarrados por varias horas en el sol, generando una actitud agresiva derivado de las condiciones desfavorables.
En este caso, los perros que se muestran demasiado hostiles posterior a la agresión y que no tienen su esquema de vacunas completo, permanecen 10 días en observación antes de regresarlo a sus dueños, y estos firman un documento en donde él se hace responsable del animal y si vuelve agredir entonces es retirado como marca la norma oficial 042 y lo que marca es sacrificarlo por prevención.