Suele ocurrir que cuando planchas algunas prendas, el cambio de temperatura y de las mismas telas, llegas a quemar la ropa, lo cual va formando una capa "quemada" en la misma plancha que no puedes retirar tan fácilmente.
Aquí te contaremos una manera fácil de quitar lo quemado a tu plancha para que la sigas usando con confianza en tus siguientes sesiones de planchado.
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Lo que vas a ocupar será un pedazo de papel aluminio que esté más grande que el tamaño de la plancha y una cucharada de sal molida.
Primero, extiende el papel aluminio sobre una superficie plana, y asea una mesa o en el mismo burro de planchar.
Enseguida, sobre el papel verterás un par de cucharadas de sal fina, distribuido en todo el papel aluminio.
El tercer paso será prender la plancha a una temperatura media.
Cuando ya esté caliente la pasarás por el papel aluminio con sal como si fuera una prenda y después de un minuto apaga la plancha.
Por último tendrás que esperar a que se enfríe la plancha y posteriormente pasarle un paño húmedo por la superficie, de esta manera verás que lo quemado se irá limpiando con total facilidad.
Tu plancha lucirá otra vez como nueva.