Estos últimos años hemos visto un boom en la generación de contenido y de la salida de gente famosa, conocida como influencers o streamers. Esto es bastante común en cualquier lado del mundo, sin embargo, todo es diferente en China, donde las mujeres streamers se reúnen en las calles para transmitir en vivo por una peculiar y oscura razón.
La competitividad está cada vez más fuerte en el país asiático, buscando generar contenido y con ello, a seguidores que puedan darles gratificaciones económicas, o incluso una buena posición social. Esta justamente es la labor de una parte de las jóvenes en China, quienes buscan mejorar sus condiciones con actividades cada vez más extremas.
Aquí lo conocemos como Tik Tok, pero el gigante chino se llama en realidad Douyin, propiedad de la empresa ByteDance. Gracias al posicionamiento geografía de la aplicación, su algoritmo recomendará a los usuarios a ciertos creadores de contenido dependiendo de la cercanía de su ubicación.
Aquí entra la labor de las streamers chinas, quienes ocupan la vía pública en zonas con un mayor nivel adquisitivo, dónde podrían ser vistas por los pobladores más ricos de las provincias asiáticas.
Las mujeres se reúnen en grupos, debajo de puentes vehiculares o incluso rentando fábricas para evitar ser asaltadas o incluso violadas. La escena sin duda es perturbadora, mostrando a filas de chicas realizando sus transmisiones en vivo, al mismo tiempo, buscando llamar la atención de un prospecto que le done dinero a su contenido.
Habrá que ver cómo evoluciona el hecho, pues las autoridades ya están tomando medidas para proteger y vigilar a las mujeres en esta actividad cada vez más redituable.