La empresa de autos eléctricos, Tesla, retiró varios autos en Estados Unidos por un fallo en su retrovisor, el cual podría ser un problema de seguridad en los vehículos.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) anunció esta disposición. Se tratan de 947 vehículos eléctricos, los cuales fueron mandados a revisión para cumplir con la norma de seguridad federal sobre la visibilidad trasera.
Los modelos afectados serían Model S, Model X y Model 3 de 2017 a 2020 equipados con Autopilot Computer 2.5 y que operan ciertas versiones de firmware. Tesla abría de realizar una actualización al software para solventar este problema.
Según la NHTSA, una imagen retardada de la cámara de visión trasera reduce la visión del conductor y aumenta el riesgo de un choque.
A su vez, un aviso de retirada del mercado que data del 18 de marzo pero que se hizo público hasta este viernes, desde el 19 de diciembre Tesla comenzó a implementar el 'firmware' en un número limitado de vehículos y su herramienta de monitorización de flotas pronto "identificó una frecuencia anormal de reinicios del ordenador entre los vehículos del Modelo 3" con esa actualización.
Es la última de una serie de retiradas que Tesla ha llevado a cabo por problemas de software en los últimos meses.
Tesla comentó como "durante la semana siguiente, una inspección de ingeniería sobre la situación identificó un error de software como posible causa para una mayor evaluación" al localizar la problemática del retrovisor.
"A pesar de no encontrar un defecto en las pruebas que Tesla llevó a cabo, se determinó la retirada del mercado por exceso de precaución para reconocer la posible presencia de un defecto en los vehículos afectados". Comentó la empresa en el comunicado.
Desde el 9 de febrero, Tesla y el órgano regulador revisaron las quejas de los consumidores, los cuales alegaban retrasos o falta de disponibilidad de las pantallas del retrovisor, realizando más de una docena de pruebas.
El error de Tesla, el cual terminó en el retiro de varios autos en EU por fallo en retrovisor, supone un duro golpe en la confianza de los clientes sobre la imagen del vehículo eléctrico por excelencia.
Jesús García