Un día como hoy, pero de hace 25 años -el 15 de abril del 2000- fue inaugurado el Puente del Comercio Mundial, ese que se convirtió en el motor económico de la ciudad y que cada año es el instrumento que nos ayuda a ubicarnos como el principal puerto terrestre de Latinoamérica.
Actualmente, cinco (47.7 por ciento) de cada 10 pesos recaudados en todas las aduanas fronterizas, corresponden a Nuevo Laredo, además de que nuestro puerto incrementó su recaudación durante enero del 2025 hasta en un 25.6 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior; mientras que el puerto más cercano geográficamente, que es la aduana de Colombia, disminuyó hasta en 1.3 por ciento en este tenor.
La indiscutible hegemonía del puerto de Nuevo Laredo está por prolongarse con el aumento de 8 a 18 carriles en el Puente 3, al extender por muchos años más su vida útil para de esta manera mantener el crecimiento de la actividad, sin temor a topar la capacidad del cruce.
En aquel entonces la visión y la determinación requerida para materializar una obra de esa magnitud, fue toda una hazaña y el mejor legado, además de ser el perfecto ejemplo de una obra estratégica, pues hasta el día de hoy tiene un efecto multiplicador.
Viene un nuevo trasvase y una vez más va a coincidir con el domingo de Pascua, una fecha en la que muchos acostumbran a internarse en el río, especialmente a la altura de El Patinadero, pero como en cada ocasión que se traspasan grandes cantidades de agua de la presa La Amistad a la Falcón, la creciente eleva el riesgo de las convivencias del “Día de la Coneja”.
A pesar del historial de incidentes, algunos de estos con desenlaces fatales, ha sido prácticamente imposible eliminar esa práctica tan arraigada entre los neolaredenses, siendo siempre la mayor preocupación, los más pequeños.
Ingresar al río en circunstancias normales ya es muy peligroso, pues el Bravo tiene la fama de ‘traicionero’, pero durante una creciente el riesgo aumenta mucho más, obviamente, por esa razón es que las autoridades cada año exhortan a la gente a no entrar a esas peligrosas aguas.