RÍO REVUELTO

Espejito, espejito

Escrito en OPINIÓN el

El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, le preguntó a la herramienta de inteligencia artificial (IA) generativa Grok de la red social X: “Hey, @grok, ¿quién es el presidente más popular del mundo? Responde con una palabra” y esta respondió: “Sheinbaum”.

Esto se asemeja un poco a la historia de Blancanieves, claro, con sus marcadas diferencias, pues en el cuento la reina le pregunta a un espejo mágico sobre la identidad de la mujer más bella del reino, esperando que dijera su nombre, ese no es el caso.

Grok, como cualquier otra de las herramientas o plataformas de Inteligencia Artificial, basa sus respuestas en un consenso de sus búsquedas en internet, por lo que en teoría su criterio es objetivo, como en este caso; al hablar de popularidad, consideró la cantidad de opiniones positivas en favor de una figura política.

Si bien pudiera no ser una declaración contundente o una especie de premio para presumir, sí nos habla de la percepción masiva, pues figuras mundialmente conocidas y noticiosamente recurrentes como Trump, pueden tener el apoyo de un numeroso segmento, por algo llegaron al poder, pero con una opinión o reputación negativa en gran parte del mundo, ya sea por sus políticas migratorias, los aranceles que ha estado imponiendo y otras posturas inclinadas a polarizar, nos damos cuenta que es famoso, más no popular.

Así podemos ir considerando a otros mandatarios como Putin, Zelensky, Lula da Silva, Maduro o el propio Bukele, todos tienen esos contrastes que pudieran no favorecer su imagen y, claro, Sheinbaum no está exenta de una oposición, pero de alguna manera tiene aún una opinión favorable de la mayoría de los mexicanos en el arranque de esta administración.

Só lo para aclarar, no estamos aprobando ni descalificando su gobierno, solo hablamos de percepción ciudadana, y aunque un segmento opositor podría dar la impresión de que prevalecen las críticas en redes sociales, hay que entender que estas también están segmentadas por rangos etarios e inclusive clases sociales, así que hacer ruido en una de estas no significa que lleguen a toda la población, ni mucho menos que influyan en ella.