Sí. De acuerdo con un artículo escrito por Uday Rana del Global News, consultable en timescolonist.com, publicado el 10 de septiembre de 2024, Ottawa está considerando seriamente aplicar aranceles a las baterías y semiconductores chinos. Y es que apenas unas semanas después de que Canadá impusiera mayores aranceles a los vehículos eléctricos fabricados en China y al acero y aluminio chinos, la ministra de Finanzas, Chrystia Freeland, dijo que Ottawa está lanzando un período de consulta de 30 días para considerar nuevas restricciones comerciales a Beijing.
De esta amanera, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, anunció que impondrían aranceles a los vehículos eléctricos, acero y aluminio de China.
Así, el mes pasado, el gobierno federal canadiense elevó los aranceles sobre los vehículos eléctricos chinos al 100 por ciento y sobre el acero y el aluminio chinos al 25 por ciento. El primer ministro Justin Trudeau dijo que esto se estaba haciendo para estimular la fabricación de vehículos eléctricos en Canadá.
Según el periodista Daniel-Rufiange del Times Colonist, cuyo artículo es consultable en etimescolonist.com, China acusa a Canadá de proteccionismo por los aranceles a los vehículos eléctricos, por lo que no es de extrañar que haya emitido una declaración en la que acusa a Canadá de proteccionismo, en respuesta al anuncio del gobierno canadiense de que impondrá aranceles del 100 por ciento a los vehículos eléctricos chinos importados. La nueva política está en línea con un anuncio similar hecho anteriormente por el gobierno de los Estados Unidos.
En virtud de que los vehículos eléctricos chinos están fuertemente subsidiados por su gobierno, existen temores en otros mercados de una competencia desleal que pondría en peligro los esfuerzos de electrificación de los fabricantes de automóviles mundiales. El Ministerio de Comercio de China dijo hoy que los nuevos aranceles perturbarán la estabilidad de las cadenas industriales y de suministro mundiales, puesto que habrá graves consecuencias para las relaciones económicas y comerciales entre China y Canadá, y para las empresas de ambos países.
Por lo anterior, China está fuertemente insatisfecha y se opone firmemente a estas medidas, puesto que Canadá por una parte afirma que apoya el libre comercio y el sistema multilateral de comercio basado en las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), pero viola las reglas de la OMC, pues anunció que tomarían medidas arancelarias unilaterales, lo que se traduce en el típico proteccionismo comercial. El ministerio chino instó a Canadá a corregir inmediatamente sus prácticas equivocadas y manifestó que Pekín tomaría todas las medidas necesarias para defender los derechos e intereses de las empresas chinas en Estados Unidos y Canadá. Recordemos que ha habido numerosos llamamientos para frenar a los fabricantes chinos de vehículos eléctricos en Estados Unidos, Canadá y México, mismos que se han intensificado recientemente, en respuesta al aumento de las importaciones y la inversión.
Sin duda un tema importante para la región del T-Mec.
Hasta pronto.