Se acercan las elecciones. A pesar de que las elecciones presidenciales son las que aumentan la participación ciudadana, en Nuevo Laredo, según los datos que se exponen cerca de la Presidencia, prácticamente a la mitad de la ciudadanía no le importa votar.
Hoy quisiera referirme al mensaje de abril pasado de los obispos del estado de Guerrero, dieron el siguiente mensaje:
Estamos en pleno proceso electoral de nuestro país, el cual concluirá con la jornada de votación el domingo 2 de junio. Todos los mexicanos a partir de los 18 años estamos moralmente obligados a cumplir con nuestro derecho y deber de emitir nuestro voto libre, responsable y secreto, para elegir a quienes nos han de representar en las decisiones políticas de nuestro país. En el ámbito federal elegiremos Presidente de la República, a diputados y a senadores; en el ámbito local al Congreso del Estado y a los presidentes municipales.
La Conferencia del Episcopado Mexicano recientemente nos ha ofrecido algunos instrumentos de concientización y reflexión: “Un compromiso que trasciende las urnas: llamado a la oración perseverante rumbo a las elecciones”, “Por el bien de México, primero la democracia y el estado de derecho”, “Amar a México: orando, participando y construyendo juntos la paz”.
Como pastores de la Iglesia Católica dirigiéndonos a los diferentes actores que participan en el proceso electoral, antes, en y después del día de la elección.
1) A los ciudadanos, en general. Los invitamos encarecidamente a participar en la vida política de nuestro país para evitar que una minoría sea la que determine el rumbo de nuestra sociedad.
+ Es necesario conocer a todos los candidatos de los distintos partidos y sus propuestas.
+ Es importante escuchar, dialogar de manera razonada, expresar necesidades, manifestar expectativas, hacer propuestas, votar y organizarse para contribuir al avance de los pueblos, ciudades, municipios, estado y país.
+ Evitar las descalificaciones, los insultos y actitudes que provocan rupturas o divisiones, las cuales incluso perduran más allá del proceso electoral y de la vida política.
+ Ante la situación de inseguridad, violencia, extrema pobreza, desigualdad social y polarización política debemos participar para encontrar juntos la solución y evitar que grupos de poder o políticos las usen como oportunidad para manipular el voto y controlar la vida ciudadana.
2. A las autoridades electorales locales y nacionales. Les hacemos un llamado a cuidar la legalidad durante todo el proceso electoral; antes, durante y después de la jornada de elecciones. Que todos los actores políticos se mantengan en el marco de la ley y de sus reglamentaciones. Un cuidado muy particular ha de darse a todas las formas en las que la delincuencia organizada pretenda incidir en estas elecciones, como las presiones ilegales a candidatos y electores, el financiamiento a partidos o a candidatos, etc. También han de cuidar la seguridad durante este proceso, con la colaboración de las instituciones de seguridad.
3. A los partidos políticos y a sus candidatos. Entendiendo que “la política es una de las formas más elevadas de la caridad porque sirve al bien común”, les hacemos un llamado a promover la amistad social en medio de sus contiendas electorales, sabiendo que la unidad es mejor que el conflicto y que nuestro país requiere de unidad para afrontar los grandes problemas que hoy tenemos como la inseguridad, la violencia, la impunidad y la desigualdad social. Les exhortamos a abstenerse de cualquier forma de violencia en sus intervenciones públicas para no contribuir a la polarización social y política que ya tenemos.
4. A las autoridades en funciones del poder ejecutivo, legislativo y judicial. Los invitamos a:
+ Proteger la democracia y el Estado de derecho, respetando y aplicando las leyes y reglamentaciones de la nación, a las instituciones y a los ciudadanos.
+ Mantenerse imparciales para buscar el bien común.
+ Poner una especial atención en este proceso electoral para brindar seguridad a los candidatos y a los ciudadanos.
5. A los sacerdotes: les Ilamamos a ejercitar su ministerio pastoral con plena libertad y ofrecer a los fieles las orientaciones que provienen de la fe cristiana, con sus consecuencias éticas en cualquiera de los temas que se discutan en el proceso electoral.
Hay que promover el sentido de corresponsabilidad en la toma de decisiones para el bien de la democracia y del estado de derecho en el país. Recuerden que están Ilamados a promover la comunión, por lo cual evitarán utilizar su ministerio pastoral en favor o en contra de candidatos o partidos políticos.
La libertad es fruto de la verdad. Necesitamos reconocer la verdad en todo para hacer las transformaciones necesarias para una vida libre de cualquier forma de esclavitud. Queremos vivir libres de violencias, de injusticias, de abusos de poder, de conformismo y de indiferencia.
Que nuestras palabras inspiren en todos, vivos deseos y el compromiso de construir la paz con justicia que necesita nuestro país. La verdad tiene el potencial para construir un entorno de fraternidad que necesitamos en todas partes.
padreleonardo@hotmail.com