DESDE LA FRONTERA

Infecciones adquiridas en el laboratorio y riesgo de epidemias

Escrito en OPINIÓN el

En 2021 se publicó la segunda versión del Índice Global de Seguridad en Salud que evalúa la capacidad de cada país para enfrentar epidemias y pandemias. En ese documento se considera que gran cantidad de países permanecen sin la preparación suficiente ante futuras pandemias, diferentes a la del covid-19.

El mencionado índice incluye en su análisis seis categorías, cada una de las cuales contiene distintos indicadores. Las categorías de análisis son: prevención, detección y reporte, respuesta rápida, sistema de salud, compromisos para mejorar la capacidad nacional en el aspecto financiero y en las normas para prevenir armas biológicas, y el entorno de riesgo. En resumen, se analizaron 198 países cuyos resultados mostraron un contraste importante, entre ellos en los puntajes de cada categoría de análisis y también en el puntaje global. Es decir, hay países que tienen buena capacidad, al menos en teoría, para afrontar contingencias epidemiológicas, que contrastan con otros que muestran importantes debilidades.

Debido al gran impacto que la pandemia tuvo en la población mundial, resulta necesaria la preparación de los países para nuevas contingencias epidemiológicas. Ante los múltiples cambios que experimentan las sociedades actuales, como la facilidad de desplazamiento internacional de personas, la urbanización, el crecimiento poblacional, el cambio climático, los avances en la biotecnología y la ingeniería de armas biológicas, conducen a aumentar el riesgo de la presencia de nuevas pandemias. En particular, es importante reflexionar sobre las infecciones adquiridas en el laboratorio y su posterior difusión en la población general.

Recientemente Blacksell y colaboradores publicaron, en la revista The Lancet Microbe, un estudio sobre las infecciones de laboratorio utilizando información recabada entre 2002 y 2021. Este fenómeno comprende cualquier infección adquirida por exposición a agentes biológicos durante actividades realizadas en un laboratorio. En forma accidental, los patógenos escapan al entorno exterior tras una violación de bio-contención debida a fallos en el procedimiento o de los procesos de bioingeniería.

En relación con estas infecciones, Blacksell y colaboradores documentaron casos que incluían infecciones bacterianas, virales y fúngicas, a pesar de que en la actualidad se han clasificado en cuatro niveles de bioseguridad o de riesgo los laboratorios, siendo el primer nivel como bajo riesgo, mientras que el cuarto nivel es de alto riesgo. En relación con el escape de agentes infecciosos del laboratorio, Pappas documenta en la revista Clinical Infectious Disease de noviembre de 2022, que un deficiente proceso de desinfección en una planta biofarmaceútica en Lanzhou, China, en 2019, provocó la propagación a la comunidad de brucelosis humana que afectó a 10 mil personas.

Lo anterior indica que los sistemas de salud deben intensificar sus acciones de vigilancia y de intervenciones regulatorias en laboratorios de alto riesgo. Probablemente el Índice Global de Seguridad en Salud pueda orientar sobre las fortalezas o debilidades de los sistemas de salud de los países analizados, en los rubros de prevención, detección y reporte y respuesta rápida, para mejorar el abordaje de nuevas contingencias epidemiológicas.

Piedras Negras, Coahuila, a 28 de diciembre de 2023.