RÍO REVUELTO

Un hospital al poniente sigue siendo necesario

Escrito en OPINIÓN el

Esta semana que acaba de concluir surgió con fuerza el tema de los nuevos hospitales en la ciudad, derivado del anuncio del Gobernador, el titular del INSABI y la alcaldesa, quienes adelantaron que se instalaría uno del IMSS-BIENESTAR al sur de Nuevo Laredo.

Para poner las cosas en claro, se supone que este proyecto no sustituye al que se pretende instalar al poniente, sino que surgió de manera paralela más que alterna, además de que se contempla que este hospital al sur sería relativamente pequeño, aunque suficiente para atender las emergencias que se susciten en vialidades susceptibles a percances como la carretera Nacional y la carretera Aeropuerto, evitando que se tengan que trasladar hasta el primer cuadro de la ciudad donde se encuentra el Hospital General y el de Zona Número 11 del IMSS.

La mancha urbana se fue expandiendo más al poniente que al sur, por esta razón se había planteado y designado un terreno relativamente cercano a la Unidad de Medicina Familiar Número 76, que se encuentra estratégicamente accesible por vías rápidas a todas las colonias de ese cuadrante.

Un claro ejemplo de como el poniente está distante de los servicios médicos de emergencia ocurrió el 14 de febrero, cuando los estudiantes de la secundaria 80 fueron embestidos por una camioneta, pues tuvieron que ser trasladados al Hospital General que se encuentra a más de 12 kilómetros, distancia que se traduce en al menos 25 minutos de trayecto cuando las condiciones de tráfico son moderadas, aunque esto se puede incrementar en horas pico; y aunque los alumnos de entre 13 y 15 años sobrevivieron y están fuera de peligro, han ocurrido casos en que los lesionados fallecen en la ambulancia de camino al hospital.

De hecho, la mayoría de los percances más drásticos suelen ocurrir en el poniente de la ciudad, pues allá se concentra la mayoría de la población y vias rápidas, lo que lo hace más susceptible a esta clase de incidentes.