En los siguientes cuatro días se acaba el sexenio de Francisco García Cabeza de Vaca, uno de los gobernadores de México con más acusaciones en su contra por corrupción, abuso político y enriquecimiento ilícito.
Termina el periodo de gobierno, pero inicia el periodo en que el gobierno actual, federal y estatal, deberán demostrar si somos un país de leyes, y si el gobernador, ya sin fuero, enfrentará las acusaciones en su contra.
Sin embargo, hay reportes que afirman que el gobernador saliente huirá hacia Estados Unidos, unos dicen que a McAllen, otros que a Dallas, Texas, donde ya está parte de su familia.
Se menciona estará en Estados Unidos un tiempo, hasta que lleguen las próximas elecciones, y que su partido lo cobijará con el manto protector de una senaduría plurinominal en 2024, o sea sin tener que recibir un solo voto, sólo la bendición del Partido Acción Nacional y su dirigencia.
Artimañas legales, “warfare” le llaman, son las armas de las que se ha valido el gobernador acusado de corrupción sin límite, de nepotismomo, de abuso de poder, de violar la ley y de castigar a sus opositores o enemigos con persecuciones políticas.
Modificó la ley a su modo, mediante la corrupción compró conciencias de diputados.
Se le acusa de comprar lealtades en uno de los estados con mayor opacidad.
En las acusaciones en su contra hay evidencia de un enriquecimiento inexplicable por medios ilegales.
Recibió sobornos de dinero de Odebrecht para votar por la Reforma Energética y además le pagaron con la gubernatura.
Promovió el fracking para favorecer a empresas extranjeras de energía, y traicionar a la patria.
En unos días se verá si Cabeza de Vaca será prófugo o preso.
¿Usted qué opina?
La huida de Cabeza de Vaca
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