Imposible de faltar al torneo de pesca organizado por los clubs locales de pesca Cataneros, El Patín Caza y Pesca, Tío Fishing, Tecatanes y Tienda La Pesca, que en conjunto con el apoyo municipal nos dimos cita en la explanada del CITEV (justo debajo de los dos puentes internacionales) donde ni los calcinantes rayos solares de la canícula, nos frenaron con tal de practicar nuestro deporte favorito, aprovechando la fresca de la mañana se fueron llenando todos los claros disponibles sombre las márgenes del rio Bravo
La presencia de pescadores participantes en compañía de sus familias vuelve a dar un realce muy especial a este tipo de eventos, que dotan a este deporte de un plus cargado de una convivencia familiar donde el pescador participante se apresura para pasar a la mesa de registro y lograr su carnet lo más rápido posible, en el mismo lapso que la familia bien sincronizada se apresura a ganar la mejor sombra disponible de los árboles, otras a desplegar su lona o toldo para resguardarse de los rayos solares.
El pescador ya con su carnet empieza a colocar sus mejores carnadas vivas y lanzarlas al agua por otra parte la familia, ya se encuentra en el proceso de acomodar los utensilios necesario para pasar un día de pesca completo, sillas plegables, mesa, hielera y por supuesto la parrilla, donde a los pocos minutos los olores de un huevo con chorizo revientan sobre las narices de los participantes tratando de no perder la concentración de los ricos olores, el participante no deja de atender las necesidades básicas de los hijos y hasta nietos, sin dejar de poner un ojo vigilante sobre la línea de pesca mientras patea el balón del inquieto hijo, aprovechando un par de cencerros atados a la caña, lo cual le avisara en caso de que se dé un enganche, sin privarse de nada aprovecha los tiempos muertos para acercarse a la mesa improvisada y disfrutar de un buen taco mientras la charla familiar se llena de sonrisas y se disfrutan de buenos momentos pues comprenden que más que un reto por capturar un pez contra reloj, no les representa el mas mínimo estrés, por el contrario, ellos ya ganaron con tan solo estar reunidos.
La mayoría de los pescadores apuesta a lograr un enganche colocando carnadas vivas , en forma de camarón, lombrices e hígados de pollo, este estilo de pesca los obliga a estar en un solo lugar esperando a que su línea se agite con la esperanza de capturar una carpa, catán o bagre, yo adopto la postura de salir en busca de las especies que prefieren depredar como las lobinas y robaletas y coloco en mi caña todo tipo de señuelos artificiales, lo cual me compromete a caminar por toda la orilla para buscar las palizadas, hierva hundida o fosas, donde estos preces aprovechan para buscar peces más pequeños para alimentarse.
En cuestión de minutos todos los claros disponibles se llenan de entusiastas participantes, eso me ofrece la pauta para saludar y estrechar manos de muchos de ellos, mientras sigo avanzando y realizando lances, es fácil intercambiar desde un simple saludo hasta una charla amigable con todos por la orilla, también con sus familias así es como los pescadores de hueso colorado de la zona te aceptan como uno más del grupo, mientras sigo intentando capturar un pez, en menos de cien metros caminados ya había recibido el invite de todo tipos de tacos y combinaciones de guisados, los olores de los sartenes te obligan a romper la dieta y por educación no podía despreciar tan rica comida, después de recorrer toda la orilla, sin captura rompo filas y me subo a mi vehículo para visitar la zona del patinadero donde una mesa de jueces adaptada con báscula también estaba a la disposición de los pescadores.
En ese sector se aprecia una parte del rio bravo con un nivel más bajo en sus aguas, las corriente que chocan con las piedras llegan hasta la mitad del rio y hasta entonces donde se encuentra la parte más profunda, reduciendo la zona de pesca en un cincuenta por ciento, además los visitantes que aprovechan para echarse un chapuzón asustan a la fauna acuática obligándote a pescar en la parte sur del patinadero, haya es donde encontrar a media docena de participantes.
Los cuales mediante una tarraya lograron capturar carnada viva en forma de mojarras pequeñas y estas son utilizadas colocándolas en sus anzuelos y mediante lances largos y plomadas pesadas tratan de colocar lances largos que ayuden a sus anzuelos a llegar a la parte más honda del rio, ahí solo logre ver un par de capturas en forma de bagres con un peso promedio de un kilo, ya con el sol encima quemando a diestra y siniestra mi cabeza, me regreso a el área de los dos puentes para toparme en la mesa de jueces una captura en forma de robalo con más de ocho pulgadas de largo y un tremendo bagre de un kilo y medio de respeto capturado casi en la misma zona del rio.
En la premiación las caras felices de los organizadores y más de los participantes fue el común denominador todos con sudor en la frente atentos a ver los resultados donde las mujeres por muy pocos gramos de diferencia quedaron en segundo lugar.
Aprovecho para enviar un saludos a los clubs organizadores y a mi estimado vecino Jesús Duarte que en esta ocasión me acompañó de inicio a fin en el buen desarrollo del torneo…
¡Felices días de pesca para todos!
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