PÉSIMA POLÍTICA PÚBLICA Y GALOPANTE CORRUPCIÓN DE CABEZA DE VACA GENERÓ UN TAMAULIPAS ENDEBLE Y ALTAMENTE VULNERABLE A LOS CHOQUES INTERNOS Y EXTERNOS.
Como lo demuestran las Causas y efectos, aquí esbozados, del Injustificable y deplorable mayor daño de la pandemia en Tamaulipas que en los estados vecinos e incluso en los demás estados fronterizos, que han arrojado los últimos informes relativos al comportamiento económico de las 32 entidades federativas donde se evidencia el gran rezago de Tamaulipas y en los últimos años de la administración de Cabeza de Vaca aun peor.
La menor resiliencia relativa de Tamaulipas evidencia los pésimos gobiernos de los últimos 35 años, y en especial el pésimo desempeño del gobierno de Cabeza de Vaca, por lo que un esquema político de continuidad con el Truko llevaría al estado a una crisis que generaría en el menor de los casos una ingobernabilidad.
Sin embargo, la próxima administración del cambio verdadero encabezada por el Dr. Américo, buscará remediar lo más rápido posible los crecientes desequilibrios y grandes rezagos, así como desperdicio de oportunidades que enfrenta el estado derivado de las políticas neoporfiristas del viejo régimen de corruptos, entreguistas e ineptos.
El Injustificable mayor daño de la pandemia en Tamaulipas que en los estados vecinos y en los estados fronterizos, que evidenciaron los resultados de los últimos reportes trimestrales de “CÓMO VAMOS MÉXICO”, tiene diversas causas y efectos. Aquí abundaremos de manera somera sobre las causas, sabedores que los efectos conllevan a un subdesarrollo del potencial existente.
La causa: la falta de calidad en la gobernanza, la ausencia de planeación efectiva, el desuso de las mejores prácticas en el desarrollo de proveedores, la ausencia de una política de valor agregado y desarrollo industrial, entre otras.
Para explicar la muy escaza participación del PIB estatal en el PIB nacional, ya sea con respecto a los estados vecinos como a los estados fronterizos.
Con el fin de ser más contundentes y a reserva de hacer un análisis más complejo del fenómeno de La Asimetría existente entre la participación potencial y la endeble participación de Tamaulipas en el PIB nacional.
Adicionalmente aparejado a los causales de la incipiente participación de Tamaulipas en el PIB nacional tenemos una gran vulnerabilidad de la estructura económica de Tamaulipas, en lo cual poco o nada se ha hecho a través de la historia del estado.
Me refiero a rubros en lo general, es decir, tomando en cuenta el sector primario, secundario y terciario y sus vocaciones óptimas por región, ha brillado por su ausencia una política holística de desarrollo regional que permita maximizar las oportunidades de desarrollo de cada región, articulando el sector educativo, la investigación que conlleva la absorción, aplicación y desarrollo tecnológico, la infraestructura productiva, de conectividad y social que conlleva el poder lograr un desarrollo óptimo.
Es decir, la falta de vigor en la participación nacional y la escaza resiliencia es consecuencia en primer término de la falta de una política regional holística.
Es decir, la aplicación de una política de desarrollo regional de largo aliento que tienda a equilibrar los tremendos niveles de dualismo económico entre las regiones del estado, así como el insultante desaprovechamiento de las oportunidades de desarrollo.
Aunado a un gran vacío del poder legislativo en la contribución al desarrollo de políticas públicas, así como su vigencia, obligatoriedad y aplicación de estas para coadyuvar al desarrollo. En esta categoría está la nula planeación del desarrollo que queda en mera simulación en la rendición de cuentas y evaluación del desempeño.
El casi nulo combate a la corrupción que generalmente viene de fuera, la nula planeación democrática del desarrollo, el nulo contrapeso de la sociedad en pleno para evaluar el precario desempeño gubernamental, la nula existencia de una política viable de financiamiento del desarrollo, la imposición al garete de una política fiscal centralista, la letra muerta para efectos claros de la ley de competitividad, la politización de los centros de docencia e investigación, la nula vigencia de auditorías populares, la nula interactuación de los presupuestos participativos, la cero presencia de la revocación de mandato, el plebiscito y las consultas populares y el referéndum. Sin estas reglamentaciones transversales no hay estado, ciudad o país que salga adelante.
Sobre todo, si reina la corrupción, la impunidad, el estado de chueco, la incertidumbre jurídica, etc.
Ahora en el ámbito económico tenemos una ausencia total del inventario de proyectos estratégicos detonadores del desarrollo, y una ausencia total de la definición de los proyectos estratégicos de mayor urgencia y apremio de solución. En cada una de las regiones y microrregiones.
No se cuenta en el estado con un programa de valor agregado, tanto al comercio internacional como a la coproducción interpaíses, tampoco un programa de sustitución o inteligente de importaciones, ni tampoco un programa de comprar lo que el estado produce.
El aprovechamiento de los 14 tratados de libre comercio y complementación económica es nulo, los programas de inserción de las MiPymes se limitan a la parte de otorgar un crédito insuficiente e inoportuno más bien basado en cuestiones clientelares que en aspectos económicos de fomento y creación y articulación de las cadenas productivas para generar valor agregado.
Para no ahondar más en el tema obviaré temas como la economís circular, la economía social, etc.