Cae el Bronco ¿quién sigue?

Bien dicen que el miedo no anda en burro, o para ponerlo en términos amables, Cabeza de Vaca es muy prudente, por su decisión de cancelar a ultima hora el miniinforme anual de actividades que iba a rendir en Nuevo Laredo.
Esa ciudad tuvo el fin de semana anterior, una terrible jornada de violencia, igual que ocurrió en Reynosa, donde el gobierno estatal panista se declaró impotente para restablecer la seguridad pública.
Le resulta a Cabeza de Vaca más fácil, cómodo y barato, lavarse las manos y aventarle la papa caliente al gobierno federal, porque al fin y al cabo se trata de delitos del fuero federal por el tipo de armamento que sale a relucir.
El presidente Andrés Manuel López Obrador envió refuerzos policiacos y militares a zonas conflictivas donde se han recrudecido los enfrentamientos con delincuentes o entre ellos mismos, pero no se ha confirmado que incluyó a Tamaulipas.
Cabeza de Vaca anda contrito, meditabundo, cansado, ojeroso y sin ilusiones, por la mala suerte que le cayó encima a su excolega de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, que ahora muerde barrote, vulgo, está preso.
Ganó Rodríguez Calderón triste celebridad cuando propuso que les mocharan las manos a los ladrones, y ahora sus detractores se dan gusto publicando la sugerencia de que le apliquen su propio remedio. El Bronco está siendo investigado por la justicia por la presunción de que hizo manejos irregulares de finanzas públicas, para decirlo en plata limpia, que se fue al baño con el dinero oficial.
No son pocos los ciudadanos que están pidiendo que alguien de Tamaulipas/Texas ponga sus barbas a remojar, insinuando que pronto podría estar pasando los mismos apuros del Bronco, privado de la libertad y rindiendo información de su fortuna inconmensurable.
Cabeza de Vaca es todo un caso. Existe orden de aprehensión en su contra, tiene los bienes congelados, lo despojaron del fuero, no se presenta a despachar en palacio de gobierno, pero anda de gira rindiendo miniinformes. Por supuesto, se trata de solo retórica, tacos de lengua, montajes para el lucimiento personal, mentiras, mentiras y más mentiras.
Son un montón de cínicos el mandatario y sus paniaguados, al grado de que montarán una segunda versión de esta farsa, con la comparecencia de funcionarios del Gabinete, para hacer en tribunas del Congreso local “la glosa del informe”.
Desafortunadamente, la oposición al PAN-gobierno está en pañales, pues Morena tiene sus propias diferencias internas que la mantienen blandengue pues da un paso adelante, pero dos para atrás. Así se desprende de las más recientes rencillas que han trascendido a la opinión pública, como la expulsión de dos diputadas locales de Morena que tienen adoración por el PAN-gobierno y la retractación de la medida que hicieron el delegado especial Ernesto Palacios Cordero y Armando Zertuche Zuani.
Cabeza de Vaca se desternilla de risa, pues consiguió con creces su propósito de regar tantos billetes de banco entre diputados “de la oposición”, pues los exhibe, los divide, los enfrenta… y los vence.
Zertuche Zuani perdió la presidencia de la Junta de Coordinación Política en el Congreso local, debido a que las dos diputadas de ese partido que se fueron al PAN por razones obvias, le hicieron perder fuerza. Pero Cabeza no consiguió que también lo destituyeran como coordinador de la bancada de Morena, pues ayer fue confirmado en el cargo, por el delegado especial del CEN, Palacios Cordero.
En la conferencia de prensa ayer con representantes de Morena-Verde-PT, Manuel Muñoz Cano, presumió que el profesor Enrique Meléndez Pérez, exdirigente de la Sección 30 del SNTE y del desaparecido partido de la profesora Elba Esther, Redes Sociales, ahora es Verde, lo mismo que su estructura estatal.
Retomamos el tema del Bronco reynero, para agregar que desde un principio se reveló como gobernador corrupto, con aquel escándalo de la compra de 200 mil cobijas a precios inflados. Cabeza tiene ahora poder político, como lo tuvo en su tiempo el Bronco en Nuevo León, pero no todo es para siempre, y llegará el tiempo en que sea sentado en el banquillo de los acusados.
Ernesto Palacios Cordero acusó que los órganos electorales de Tamaulipas están supeditados a Cabeza de Vaca, pues las acusaciones en su contra se congelan y las que él registra contra sus detractores, son procesadas inmediatamente. Citó como ejemplo el maratón de miniinformes de actividades, asegurando que se trata de una parafernalia eminentemente propagandística en materia electoral.