Creo que a muchos nos ha pasado que hemos tenido que regresar al carro, porque se nos olvidó el cubrebocas al ir a un centro comercial. O que nos prohíben entrar a comprar una botella de agua, porque no lleva uno el cubrebocas.
Sin embargo, parece que se ha caído en la exageración. Por ejemplo, para entrar a un restaurante, por ley estatal, hay que entrar con cubrebocas, pero ya adentro, nos los tenemos que quitar para comer. !Absurdo!
En Laredo, Texas, por ejemplo, ya no es obligatorio llevar cubrebocas.
En Coahuila, la semana pasada se publicó un decreto en el que ya no es obligatorio el uso del cubrebocas.
Por supuesto, quien quiera seguir usándolo, tiene todo el derecho de hacerlo. Cada quien se debe cuidar como mejor considere.
El problema es cuando el gobierno quiere imponer reglas que ya parecen absurdas. ¿Se acuerdan cuando Cabeza de Vaca convocó a un mitin? Milagrosamente, las autoridades estatales quitaron la restricción para que al desaforado político le llevaran miles de acarreados para defenderlo por las acusaciones de robar al pueblo sus recursos. Es un claro ejemplo de que las autoridades estatales han manipulado la ley a su conveniencia.
En cualquier momento, como en Coahuila, se deberá quitar la orden de usar cubrebocas obligatorio.
El uso del cubrebocas deberá ser a discreción de la ciudadanía.
¿Usted qué opina?