Ya lo dijo Carmen Lilia, que los cinco años de Rivas no están exentos de ser fiscalizados, es prácticamente un hecho que sus cuentas serán revisadas y en caso de existir faltantes -que sin duda los hay en cantidades descaradas-, será denunciado ante las instancias correspondientes.
La Ruta Jabalí ya presentó un gran daño con la necedad de proyecto del centro de convenciones que incluía estadio de beisbol y parque acuático, pues si bien nada alcanzaron a edificar, sí deforestaron una gran parte de esta reserva natural, además de gastar más de 2 millones de dólares en un terreno, ante esto, CLCR aseguró que de su parte ese proyecto ya no tendrá seguimiento.
Hay que recordar que ese proyecto tuvo como antecesor otro igual de turbio, el World Trade Center, que era básicamente lo mismo y en un terreno contiguo, pero como Mónica García denunció que había una posible triangulación de recursos, además de que sería edificado en un área de riesgo, la controversia terminó por echar abajo los planes de Rivas, pero como estaba necio con eso, adquirió los terrenos contiguos y propuso lo del centro de convenciones, que era prácticamente lo mismo.
El anuncio del proyecto lo hizo justo en el marco del momento más álgido de la pandemia, cuando las necesidades de enseres de salud apremiaban y la ausencia del Ayuntamiento en este sentido -y en todos- era notoria, por lo que su iniciativa fue duramente criticada por la ciudadanía que la veía como una obra innecesaria, pues además ya hay dos estadios de beisbol, el parque acuático pretendía ser de dimensiones similares a la alberca Camécuaro y el centro de convenciones ni se diga, pues pretendía edificarse junto al Centro Cultural, que ya de por sí está subutilizado.
Rivas va a regresar, pero no lo que se robó, sino al gobierno municipal para intentar arreglar en los meses que le quedan, todos los registros, faltantes y anomalías de los últimos cinco años, una misión imposible que creyó que no tendría que hacer al estar confiado de que el PAN se quedaría en la alcaldía y el Estado, pues la siguiente administración le va a señalar sus inconsistencias y el próximo Congreso con mayoría de Morena, no le va a aprobar las cuentas.
El próximo proceso de entrega-recepción será particularmente tenso, pues no podrán ocultar sus tranzas y la siguiente administración no les va a solapar.
Samuel García aún no inicia su gestión como gobernador y ya comenzó a sembrar el encono con los tamaulipecos, aunque lo peor es que García Cabeza de Vaca ni para defender al Estado sirve, parece que sólo está para defender sus propios intereses.
La verdad es que como próximo gobernador neolonés, no tendría las facultades como él cree, de disponer del agua a su antojo, pues detrás de eso hay acuerdos previamente establecidos que deben de cumplirse, además de que instancias federales como Conagua, se encargan de administrar estos recursos.