A un año del cierre de la frontera al ganado de exportación por un brote de la plaga del gusano barrenador al sur del país, los productores locales presentaron un incremento de hasta el 83 por ciento en el precio de sus cabezas de ganado, al venderlo en subastas de la región.
“Muchos ganaderos que toda la vida exportaban, pues obviamente en un principio, les pegó, entonces, la verdad, muchos ganaderos, vieron el cierre como una oportunidad para que el precio del becerro y del ganado en general se fuera para arriba nacionalmente”, expresó Rubén González Villarreal, director de Desarrollo Rural.
El incremento superior al 80 por ciento se conjugó “por ejemplo, un becerro -vivo- de 200 kilos, 220 kilos que anteriormente, en noviembre del año pasado andaban en 60 pesos el kilo, la hembra andaba en 55 pesos alrededor, un aproximado, pero a raíz de todo eso se empezaron a hacer más subastas, aquí alrededor en la región; alrededor del municipio de Nuevo Laredo, Ciudad Victoria Tamaulipas, Sabinas Hidalgo, Nuevo León, se estuvieron vendiendo animales becerros de 200 kilos a 220 kilos, en alrededor de 108 a 112 pesos el kilo”.
Antes del cierre, tan sólo por Nuevo Laredo se llegaron a exportar hasta 30 mil cabezas de ganado; sin embargo, a finales de noviembre del año pasado se cerró, luego de que se detectaron casos del gusano barrenador en el sur del país.
“Entonces, o sea, hubo un incremento, pues estamos hablando ahí de 60 pesos a 105, 110 pesos, es decir, un 80 por ciento, mucho incrementó, entonces han subido los precios. No sabemos qué va a pasar el próximo año, porque el objetivo es que vuelvan a reabrir la frontera, para poder usar otra vez el ganado en pie”, puntualizó.
En el área de Nuevo Laredo se han colocado trampas para detectar la plaga del gusano barrenador en ranchos de la ribereña, en la cuarentenaria Emilio Portes Gil, ranchos locales y en el Rastro Municipal, donde hasta el momento no se ha detectado ninguna irregularidad.
El funcionario explicó que más que una desventaja, el cierre de la frontera se convirtió en una gran oportunidad, pues no sólo el animal en pie, macho, elevó su costo, sino que las hembras también registraron un incremento en su valor comercial de hasta un 30 por ciento.