Con el inicio de las vacaciones, ayer las filas en los puentes internacionales incrementaron drásticamente sus tiempos de cruce, entre una hora o más de una hora 15 minutos para llegar a Laredo, Texas.
Desde las primeras horas de ayer viernes, vehículos principalmente con placas de Nuevo León, Tamaulipas y Texas, formaron parte de la fila que fue aprovechada principalmente por los vendedores, quienes ofrecían desde artesanías hasta algunas botanas.
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En el área, personal de Tránsito y Vialidad vigilaba el área, principalmente para desfogar el tráfico generado.
Algunos comerciantes e incluso agentes viales señalaron que para este fin de semana esperan que el flujo sea mayor, por lo que el tiempo de espera podría también aumentar.
El periodo vacacional se combinó de nueva cuenta con una serie de obras en ambos lados de la frontera, que ha obligado al cierre de carriles tanto de ida como de vuelta, con la colocación de rayos gamma.
Los trabajos iniciaron del lado mexicano desde al año pasado, mientras que del lado americano este año, generando molestias entre los conductores.
Lo anterior provoca un cuello de botella en diversos puntos, como el acceso inmediato a las casetas de Banjército y de peaje, para los que hay sólo dos carriles habilitados del lado mexicano, de cuatro existentes, además de que en la plancha del puente, también
se realizan obras de repavimentación que de igual manera limitan la disponibilidad de líneas.