Decenas de apagones en todos los cuadrantes de la ciudad se han registrado en los últimos días, cuando el termómetro ha superado los 40 grados centígrados de manera consecutiva y derivado de esto, el incremento en el consumo por el uso masivo de aires acondicionados y minisplits para tolerar las altas temperaturas que han prevalecido en Nuevo Laredo.
Tal es el caso de los y las vecinas de la calle Santa Inés, entre San Patricio y San Fulgencio, de la colonia Villas de San Miguel, quienes manifestaron haber cumplido ayer, cinco días sin energía eléctrica.
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“Tenemos una semana completa sin luz, en la cuadra hay personas con discapacidad y adultos mayores que no pueden estar soportando esos calores”, expresó una de las vecinas de Villas de San Miguel.
Si bien las afectaciones a la salud -por encima de la comodidad- es una de las principales preocupaciones para una considerable cantidad de los afectados por los prolongados cortes del servicio de electricidad debido a fallas en la infraestructura, otro numeroso segmento señala que además hay pérdidas económicas por los alimentos que requieren refrigeración.
“Compramos hielo, que por cierto, se acaba rápido en las tiendas estos días, para echar lo que pudimos en hieleras, pero no cabe todo lo del refrigerador, entonces algunas cosas del mandado ya de plano se nos echaron a perder”, aseguró otra de las afectadas del mismo sector.
Esta problemática se ha presentado en todos los cuadrantes de la ciudad, uno de ellos el sector Centro, concretamente en la cuadra 9 de la avenida Obregón, donde varios domicilios cumplieron la tarde de ayer, 24 horas sin el servicio de electricidad, luego de que un transformador se vio afectado y no hubo reemplazo disponible; esto, en un área donde una gran parte de los residentes son adultos mayores.
“Vivimos muchos adultos mayores aquí, yo por ejemplo, soy diabético y tengo medicamentos, como la insulina, principalmente, que deben estar bajo refrigeración, y por si fuera poco, el calor a este nivel es malísimo para la presión, así que no se trata sólo de estar cómodos en el fresco, se trata ya de un tema de salud”, explicó Javier, residente del primer cuadro de la ciudad.
Este fenómeno podría continuar, pues el pronóstico para los siguientes diez días no sólo contempla que continúen las temperaturas calurosas por encima de los 40 grados centígrados, sino que el calor sería aún más severo con máximas de 46 grados para el martes y el resto entre 44 y 45 celsius, por lo que la alta demanda en el consumo de electricidad por el uso de sistemas de refrigeración, no concluirá a corto plazo, poniendo a prueba la capacidad de la infraestructura de la red eléctrica en la ciudad.