En los próximos seis meses, en Nuevo Laredo, las 50 obras comerciales censadas por la Secretaría de Desarrollo Económico, habrán terminado su construcción y la mayoría de ellas estarán operando con nuevos negocios.
Al menos 16 de ellas son plazas comerciales, el resto se dividen en edificios con cuatro o cinco locales o bien comercios individuales, lo que representa un detonante económico para la ciudad, sin contar el crecimiento industrial que se generará durante el año.
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“En los próximos seis meses muy probablemente podemos estar hablando de 140-150 negocios nuevos, cuando el año pasado se abrieron 276 en todo el año, entonces consideramos que este 2023, con ese ritmo, estaría superando el número de negocios abiertos el año pasado y con una experiencia bastante interesante como lo es las franquicias que llegan de otras ciudades e inversionistas locales”, dijo Jaime Mireles de la Cruz, director de Comercio Empleo y Pymes.
El desarrollo económico de la ciudad, principalmente de los pequeños y medianos negocios, se ha detonado, luego de estar en pausa desde hace 16 años, de acuerdo a organismos comerciales, así como a la experiencia del propio Míreles de la Cruz, quien ha formado parte de la Canaco, no solo a nivel local sino regional.
“Estamos hablando de un desarrollo comercial que se dio el año pasado y que se vive ahorita, sin los proyectos nuevos. Llegando los proyectos nuevos será un detonante para que esto se siga dando”, manifestó.