Si bien, los nacimientos entre las jovencitas menores de 15 años han disminuido 90 por ciento en este año, no ocurre así entre el rango de 15 a 19 años, con 44 nacimientos, comportamiento que se ha mantenido igual.
“Este año hemos tenido 691 nacimientos, de los cuales puedo decirte que 44 son entre menores de 15 a 19 años, sólo uno en una menor de 15 años. En este aspecto hemos disminuido considerablemente, pero no deja de ser preocupante, ya que por su edad son de alto riesgo para la Secretaría de Salud”, expresó Mario Alberto Pérez Coss, director del Hospital General Solidaridad.
Indicó que toda paciente menor de edad embarazada es un alto riesgo que se debe tener cuidado con sus controles prenatales, ya que puede ocasionar serios problemas de salud a la mamá y al bebé, debido a que el organismo de ella no se ha desarrollado por completo.
Los riesgos más comunes son aborto espontáneo, preeclampsia o eclampsia, diabetes gestacional, partos prematuros, y mayor riesgo a una mortalidad materna, entre otros.
“Toda paciente menor embarazada es de un riesgo alto, tiene que tener cuidado con los controles prenatales, aquí es importante el apoyo de los padres, de estar vigilantes y hablar con los hijos sobre estos temas, ya que la edad y por la condición de las menores es muy riesgoso un embarazo a temprana edad”, expresó Pérez Coss.
Según reporte del Instituto Nacional de Salud Pública, México ocupa el primer lugar en embarazo en la adolescencia entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil adolescentes de 15 a 19 años.
Además, 23 por ciento de las y los adolescentes inician su vida sexual entre los 12 y los 19 años; de éstos, 15 por ciento de los hombres y 33 por ciento de las mujeres no utilizaron ningún método anticonceptivo en su primera relación sexual. En suma, ocurren al año aproximadamente 340 mil nacimientos en mexicanas menores de 19 años.