Los neolaredenses tuvieron un aumento de peso por la pandemia. “Ganaron”, hasta 10 kilos de más, y sólo uno de cada 10 derechohabientes del ISSSTE que acudió este año para cambiar su alimentación, logrará cumplir su meta, el resto la deja a medias e incluso algunos sólo van a consulta por primera vez y ya no regresan.
El sobrepeso que cargan de más en su cuerpo, los neolaredenses se incrementó de manera súbita el 2020, durante la pandemia, ya que por la emergencia sanitaria no se podía salir a las calles, lo que derivó en ansiedad y estrés en las personas, que causó que las personas consumieran muchos más carbohidratos, que aunado a la falta de ejercicio derivó en un aumento de peso por pandemia: elevó los kilos de más entre niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad, declaró Erick Gutiérrez Soto, coordinador del programa de Regresión y prevención de Sobrepeso y Obesidad en la Clínica Hospital “Agosto 12”, del ISSSTE.
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“El sobrepeso y obesidad en nuestros derechohabientes y población en general se incrementaron durante la pandemia, el quedarse en casa, el no poder salir, sí se vio reflejado en la gordura que ganaron las personas, y si, muchos están retomando el comer sano, el cuidarse, y bajar esos kilos de más que ganaron, no todos lo logran, de hecho, es un porcentaje bajo, el que llega su meta”, expresó el nutriólogo.
Además de la pandemia, se está en unas fechas en las que por el cambio de clima que se empezará a sentir, a la gente le da más por comer lo dulce, los carbohidratos, y no es malo, pero todo exceso conlleva a ganar peso de más.
“Las porciones son una parte muy importante para todo proceso de pérdida de peso, aunado al ejercicio y una alimentación sana, la invitación es que se cuiden, a tratar de mejorar la calidad de su salud, y no es que sea difícil, lo que hace falta en la persona es tener buena actitud para lograr su meta, y cuando la gente se da cuenta de estos cambios, lo demás viene por sí solo”, expresó.
Gutiérrez Soto indicó que, con estos cambios, se mejora la salud y se previenen complicaciones de enfermedades como el Covid, el desarrollo de la diabetes y la hipertensión, y en los que ya son crónicos degenerativos se postergan daños que por sí solas hacen estas patologías.
Y si bien, antes la gente venía porque era referida por el médico familiar, ahora 5 de cada 10 acuden por voluntad propia, y los otros 5 porque los mandan sus médicos, y es donde se tiene esa deserción del paciente por no terminar una dieta o programa alimentario.