Con mensajes como “No cumplió”, “Municipio en total abandono” y “3 mil 600 millones de presupuesto sólo del 2021 sin reflejarse”, así es como se manifestaron vecinos de diversas colonias de Nuevo Laredo durante el Tercer -y último- Informe de Actividades del Gobierno Municipal.
En la historia reciente de esta ciudad, un informe de gobierno nunca había ocurrido en medio de protestas pacíficas como las que ayer se hicieron. La falta de compromiso y voluntad política, explicaron los colonos, es lo que los ha llevado a levantar la voz ante la falta de respuesta del gobierno a las necesidades más apremiantes de los ciudadanos.
LES CIERRAN LA PUERTA
Como una reacción a la protesta, empleados municipales colocaron una tabla de madera para trabar la entrada al anexo del gobierno municipal y evitar que los manifestantes ingresaran al edificio público.
“Venimos a manifestarnos por el informe que tiene hoy el señor Sanmiguel, ya que no nos ha cumplido, las colonias irregulares siguen en el total abandono. Se nos prometió una audiencia, se nos concedieron presupuestos que a la mera hora nos cancelaron.
No nos dieron seguimiento en todas las problemáticas que tenemos”, expresó Óscar Pérez, representante de los vecinos de al menos nueve colonias, todas del poniente y que son considerados algunos, como asentamientos irregulares, otros en proceso de regularización esperando incluso escrituras que se firmaron mediante un convenio con Enrique Rivas Cuéllar, por el que pagaron hasta 5 mil pesos, pero hasta el momento las familias, siguen en la incertidumbre.
PROMESAS
INCUMPLIDAS
El desazolve del arroyo que atraviesa la colonia Francisco Villa, el problema de la regularización de la Pancho Villa, 150 Aniversario, Vamos Tamaulipas, Blanca Navidad, Lomas del Rosario, son sólo algunos de los compromisos del Ayuntamiento con los ciudadanos que, a días de concluir la administración, siguen sin cumplirse.
Además de eso, los vecinos manifestantes han considerado, como muchos otros neolaredenses, que la ciudad está hecha ‘un desastre’, desde la extraordinaria cantidad de baches y socavones, hasta la falta de inversión y mantenimiento.
“Es una protesta enérgica a la malversación de recursos. Algunas personas tachan a alguien de ladrón, es un gobierno totalmente omiso, ajeno a las necesidades del pueblo. No toma en cuenta al ciudadano de ninguna de sus formas”, resaltó.
Para los vecinos de las colonias populares, el fin de esta administración era en definitiva, una razón para celebrar, pues la ciudad se encuentra en condiciones deplorables que han sido constantemente señaladas por los neolaredenses