Un cafre del volante estuvo a punto de causar una tragedia mayúscula, pues al ir circulando a gran velocidad por la Carretera Nacional, impactó a un autobús foráneo en el que viajaban más de 40 personas.
Paramédicos y oficiales operativos de Protección Civil y Bomberos confirmaron que todas las personas que viajaban en la unidad de transporte, incluido su operador se encontraban fuera de peligro, aunque asustadas.
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El accidente se registró ayer en la madrugada a la altura del kilómetro 14, al sur de este municipio.
Ángel, de 57 años, quien conducía el autobús Volvo modelo 2017 con el número económico 3097, arribó a Nuevo Laredo procedente de Dallas, Texas.
Al ir por los carriles de norte a sur de la Carretera Nacional con destino a Guanajuato, el autobús fue chocado por una camioneta y quien conducía iba en ese mismo sentido.
Del impacto, la camioneta rebotó y quien manejaba se retiró a toda prisa, mientras el camión se proyectó hacia la estructura metálica de un retorno, del Ayuntamiento.
Pese a lo aparatoso del accidente ningún pasajero resultó herido, así lo constataron los oficiales operativos de Protección Civil que los auxiliaron.