En la administración de Enrique Rivas las descargas de aguas residuales no tratadas al río Bravo se duplicaron. Fue a partir de las fuertes lluvias ocurridas en septiembre del 2018 cuando colapsaron varios colectores, lo que derivó en el incremento de las descargas. “Hemos tenido -descargas de- 500 litros por segundo del 2018 para acá, antes eran cerca de 240 litros por segundo, se duplicó en estos últimos años, señaló Agustin Boone, el representante de la CILA.
En el 2011 la descarga de aguas sucias era de 300 litros por segundo, del 2011 al 2015 bajó a 240 lps, situación que cambió en el primer periodo de Enrique Rivas. “En el 2018 con las lluvias presentadas se colapsaron muchos drenajes y la mayor parte era de El Coyote, ya ahí fue cuando se incrementó en gran medida, en pocos meses ya teníamos ese flujo de 500 litros por segundo”, agregó.
Aunque las descargas se mantienen en los mismos lugares, estas, que se presentan desde el norponiente al sureste han venido aumentando su volumen, en el marco de los diversos brotes que aparecen, por ejemplo los situados en la colonia La Paz, El Laguito, los Fresnos, Nueva Era, entre otros.
Si bien se han realizado algunas reparaciones, estas han sido por tramos y no de manera completa, ante esto, diversos organismos ambientalistas y ciudadanos en general han planteado en varias ocasiones la necesidad de una estrategia o plan integral para concretar una reparación total de los colectores, pues desde 1989 no se ha tenido.
NIVELES DE COLIFORMES
Por otra parte, aunado al problema de las descargas constantes al Bravo, se encuentran las partículas coliformes o residuos fecales, el cual de acuerdo a la Comisión Internacional de Límites y Aguas, se encuentra por encima del promedio.
En las áreas conurbadas que colindan con el río Bravo y los arroyos, es donde se calcula la mayor presencia de coliformes, los cuales son tipos de bacterias que, según lo señalado por Boone, mientras haya presencia de aguas negras, la elevación de los parámetros continuarán.
RECURSOS DEL NADBANK
En el 2018 el Ayuntamiento de Nuevo Laredo anunció un recurso de 5 millones de dólares provenientes del Banco de Desarrollo de América del Norte (NADBANK), y firmó ante ellos el compromiso de implementar un proyecto para eliminar las descargas de drenaje sanitario a la cuenca del arroyo El Coyote y El Laguito.
Sin embargo,hasta la fecha no se ha puesto en marcha. En los últimos dos años Comapa ha tenido en fase de estudios esta problemática, en el mes de julio del 2018 señalaron que llevaban un 60% de avance en la supervisión del proyecto para la eliminación de descargas de agua residual en El Laguito, uno de los puntos con mayor contaminación, sin embargo, hasta la fecha no se ha concretado.
BORBOTONES DE AGUAS NEGRAS
El arroyo El Coyote en el sector Fovissste-Benito Juárez, específicamente a la altura de las calles Paseo de la Cañada y General Miramón se observa una fuerte descarga de aguas residuales que se vierten de manera constante al afluente, donde los vecinos se quejan de los fétidos olores.
Existen al menos 11 descargas fuertes, una de ellas es el Arroyo El Coyote, que a su vez engloba cerca de 30 “pequeñas” descargas que en suma representan un serio problema de contaminación.
Una de las más severas descargas ocurre en el área nororiente de El Laguito, que representa su principal ingreso de agua, que es residual y se acumula en el lago carente de oxigenadores, algo que ha sido devastador para la flora y fauna de dicho espacio.