El transporte público en Nuevo Laredo se congeló, literalmente, pues la falta de anticongelante en las unidades provocó la descompostura de decenas de camiones que no pudieron dar servicio durante el lunes; el martes se restableció tarde -9:00 de la mañana- con apenas 40 por ciento de las unidades. Al menos del grupo Cien, uno de los concesionarios que operan en la ciudad, salieron a trabajar y suspendieron de manera definitiva a las 7:00 de la tarde de ayer.
Las bajas temperaturas provocaron que decenas de unidades quedaran sin operar, debido al congelamiento de mangueras o radiadores, mientras que la Delegación de Transporte, no emitió comunicado alguno a pesar de los constantes cuestionamientos ciudadanos.
Cientos de usuarios desde el lunes preguntaron sobre el servicio sin obtener respuesta, silencio que provocó que muchos trabajadores no pudieran trasladarse a cumplir con sus labores; en el mejor de los casos llegaron tarde.
“No nos avisaron, ahorita ya tengo mucho esperando un camión aquí en la plaza; si no me equivoco ya voy por dos horas, pero no sabemos qué está pasando y hasta cuándo van a continuar así”, expresó Margarita, quien esperaba en la parada ubicada en Arteaga y Guerrero, en la plaza México.
Las pocas unidades tuvieron una frecuencia deficiente, pues de seis camiones por sector se redujo sólo a dos, con poca asistencia de choferes además, por lo que se redujo el horario de servicio ayer, hasta las 7:00 de la tarde.
“Traemos como 10 camiones nada más, como un 60 por ciento no quisieron prender, la mayoría de los camiones no llevan anticongelante sino agua, por eso tenemos problemas por el frío. Ahorita ya andan los mecánicos reparándolos y esperamos pronto poder restablecer en su totalidad”, expresó uno de los responsables de la central de camiones, ubicada en González entre Morelos y Juárez.
Hoy el servicio se reanudará en horario normal, a partir de las 6:00 de la mañana.