Ayer cerró la jornada de vacunación para rezagados de segunda dosis, a quienes se aplicaron inmunizaciones de Pfizer; fueron un total de 13 mil 549.
En el caso de las vacunas Sinovac, que desde el primer día se agotaron, al sólo haber 500 biológicos, las personas que no alcanzaron debieron registrarse para una próxima jornada, siendo más de 600 quienes requieren completar su esquema de vacunación.
Esta jornada sólo se presentó por tres días consecutivos, aunque los representantes de la subdelegación de Bienestar, quienes tienen a cargo la brigada de vacunación, señalaron que vendrán más oportunidades para aplicarse incluso la primera dosis, pues aún hay personas que faltan por recibir la misma.
En Nuevo Laredo, la vacunación comenzó desde enero con el personal de salud, posteriormente para las personas mayores de 60 años, quienes tuvieron una gran respuesta al llamado para protegerse contra el coronavirus.
Hoy en día en la ciudad más del 73 % de la población a partir de los 18 años ya está inmunizada y pese a que los números de contagio han disminuido considerablemente, las autoridades han hecho el llamado de no bajar la guardia con las medidas ya estipuladas en materia de salud, principalmente portar el cubrebocas correctamente, uso de gel antibacterial y el lavado frecuentemente de manos.
La vacunación ha sido una luz de esperanza tras la pandemia, que se ha vivido desde hace 18 meses en la ciudad y que ha cobrado más de 840 vidas en Nuevo Laredo y 920 en Laredo, Texas.
Hoy en día la mayoría de los habitantes de Nuevo Laredo mayores de edad se han aplicado al menos una dosis.
De acuerdo a datos del Inegi del 2020, en Nuevo Laredo existen 289 mil 100 neolaredenses de 18 años en adelante y desde enero a la fecha se han vacunado más de 212 mil 777 personas, entre personal médico, docentes y población abierta.