En un escenario global marcado por movimientos estratégicos en política monetaria, el peso mexicano sube con un desempeño que refleja la anticipación de recortes en el costo del financiamiento tanto en Estados Unidos como en territorio nacional.
Durante la última sesión semanal, la moneda nacional concluyó con una valorización en 18.30 unidades por dólar que reafirmó la percepción de mayor estabilidad cambiaria ante las recientes señales del entorno económico.
Dólar tiene 'viernes negro'
Especialistas del sector financiero explicaron que los inversionistas han aumentado sus posiciones en activos emergentes tras diversos mensajes emitidos por autoridades de la Reserva Federal, cuyos análisis dan pie a la probabilidad de un ajuste a la baja en las tasas estadounidenses en el corto plazo.
Te podría interesar
Esta expectativa ha fortalecido el ánimo de los mercados, provocando un notable incremento en la toma de riesgos y una mejora en los índices bursátiles.
A la par, operadores locales prevén que el banco central mexicano aplique un recorte similar antes de finalizar diciembre, lo que podría incidir en una nueva etapa de ajustes en la política interna.
Los reportes recientes sobre empleo divulgados por el instituto estadístico nacional mostraron un nivel reducido de desocupación durante octubre, cifra que se mantiene sin cambios respecto a los registros no ajustados de ese mismo periodo.
A pesar de que el volumen de transacciones se mantuvo por debajo de su promedio habitual debido a la jornada reducida en Wall Street tras el feriado estadounidense, los mercados internacionales experimentaron momentos de cautela luego de una falla temporal en una de las plataformas bursátiles globales más relevantes, lo que frenó momentáneamente la operación de contratos a futuro.
Proyecciones para el peso mexicano
Firmas de análisis destacaron que, para el inicio de la próxima semana, se prevé un rango acotado en el tipo de cambio, condicionado al comportamiento del dólar y a los resultados de los índices manufactureros que serán publicados en ambas economías.
Proyecciones de instituciones financieras apuntan a que el valor de la divisa mexicana podría cerrar el año ligeramente por arriba del nivel actual, manteniendo una trayectoria estable hacia 2026.