Para muchas familias, las fiestas patrias son sinónimo de comer pozole, y hay buenas noticias para ellos. Resulta que este guiso caldoso es saludable, según el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Estas son las razones. También te puede interesar: Chiles en nogada, ¿sobrevalorados y caros?
El pozole es un platillo mexicano de origen prehispánico, pues según la historia oficial su preparación se remonta hasta los tiempos de los sacrificios. El ingrediente de cajón es el maíz pozolero, mismo que es ablandando previamente en la preparación. Actualmente, en el país hay tres versiones de este manjar, distinguidos por su color: verde, blanco y rojo, siendo este último el más popular.
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Además de su sabor, según información del IMSS, es una preparación ideal para las fiestas patrias por su aporte nutricional. “Combina los tres principales grupos de alimentos (verduras, cereales y alimentos de origen animal”, resalta la institución de salud. No obstante, el ‘chiste’ está en cuidar la porción.
El plato ‘perfecto’ de pozole debe tener los siguientes rasgos y cantidades, de acuerdo con la valoración de IMSS:
- Debe ser un plato o tazón mediano de unos 300 mililitros con ? de taza de maíz, 40 gramos de proteína (si es cerdo, lo ideal es ocupar maciza, también puede utilizarse una pieza de pollo) y una taza de verduras (lechuga, rábano y cebolla).
- En cuanto a las tostadas, se recomienda que sean fritas y de bajo contenido calórico, máximo tres piezas; otra opción es hacerlas directamente en el comal.
- La crema de las tostadas deberá ser baja en grasa.
Pozole, una de las sopas más ricas del mundo
Por otro lado, la publicación culinaria internacional Taste Atlas colocó al pozole como la decimotercera sopa más rica del mundo. El plato que se llevó la corona es el vori-vori, tradicional de Paraguay: consiste en una sopa de verduras con pequeñas bolas de harina y queso.