RELIGIÓN

Pasión de Cristo: La vez que un Judas murió ahorcado de verdad en Michoacán

El terrible hecho ocurrió en el Vía Crucis de Barranquillas, en el municipio de Tancítaro, Michoacán.

La polémica representación del personaje terminó en la trágica muerte de su representante
Muere como su personaje.La polémica representación del personaje terminó en la trágica muerte de su representanteCréditos: Especial
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Judas Iscariote es uno de los apóstoles más odiados en la religión católica; quien cargue con su representación en el Vía Crucis podría tener un mal destino. En este contexto recordamos la vez que una persona, en el papel de este personaje, murió de verdad ahorcado en Michoacán. 

Fue en el 2017 cuando un hombre de 23 años, falleció en plena actuación durante el Vía Crucis de Barranquillas, en el municipio de Tancítaro, Michoacán.

Según investigaciones preliminares la víctima, de nombre José Ignacio ‘G’, estaba actuando con el papel de Judas, por lo que se encontraba atado del cuello a un árbol; mientras estaba de pie sobre una cubeta, hubo un momento en donde perdió el equilibrio y resbaló, lo que causó que quedara suspendido.

De acuerdo a testigos, se pensó inicialmente que se trataba de una actuación de la escena, pero cuando se dieron cuenta que en realidad se estaba muriendo, lo trataron de ayudar bajándolo rápidamente de la horca.

A pesar de la asistencia de los servicios médicos, murió mientras era trasladado por una ambulancia hacia una clínica de la comunidad de Condémbaro, en la misma región purépecha.

Por lo anterior, la Procuraduría General de Justicia del Estado de Michoacán había anunciado que abrió una carpeta de investigación relacionada con la muerte de José Ignacio ‘G’, quien falleció ahorcado durante su representación de Judas.

Vía Crucis

El Vía Crucis es una actuación de la Pasión de Cristo con "la contemplación del rostro doliente del Señor", que al rezarlo, se recuerda con amor y agradecimiento lo que Jesús sufrió por salvar a la humanidad del pecado.

En Jerusalén inició la costumbre de rezar las estaciones, y ciertos sitios de la Vía Dolorosa fueron marcados desde los primeros siglos. Hacer estas estaciones de la Cruz ahora es la meta de peregrinos desde la época del emperador Constantino. La tradición fue traída por los primeros Franciscanos en territorio mexicano, allá por 1324.