La burla está tan arraigada en nuestra vida cotidiana que a menudo no reconocemos cuando estamos perpetuando la gordofobia o el acto de discriminar a alguien por el tamaño de su cuerpo.
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Los individuos que sufren sobrepeso son objeto constante de burlas o comentarios negativos. Se trata de una discriminación violenta basada en un juicio de valor moral. La gordofobia se escuda detrás de los chistes hirientes.
La discriminación a través de la Gordofobia
En México nunca se ha legislado acerca de este problema. En otros países con grandes avances democráticos se legisla poco.
Por ejemplo, Michigan en Estados Unidos, es el único estado que ha aprobado una ley que prohíbe a los empleadores penalizar a las personas gordas en su lugar de trabajo, lo que significa que en otros 49 estados las personas de gran tamaño pueden ser despedidas, negadas promociones y pagadas menos que sus contrapartes de tamaño normal.
Podemos ver cómo esa falta de regulación conduce a la discriminación: es menos probable que se contrate a los solicitantes de trabajo gordos que a los solicitantes de talla normal porque los gerentes de recursos humanos tienden a asociar la gordura con la pereza. Pero este problema no es exclusivo de los centros laborles..
No importa a dónde vayan las personas obesas, nos enfrentamos a la discriminación, y esa es la razón por la cual los activistas por la aceptación de los gordos han estado luchando desde la década de 1960 para hacer que las políticas sean más inclusivas para las personas de gran tamaño.
En días anteriores, artistas como Michelle Rodríguez posaron para revistas de moda y los ataques a su cuerpo no se hicieron esperar. La actriz tuvo que grabar un video para enfrentar el alud de críticas que recibió en minutos.
La actriz mexicana respondió en un video a las críticas feroces contra ella que lanzaron a través de redes sociales:
Hay gente que pierde la vida por comentarios como los que ustedes están haciendo
Por otra parte, legisladores como Citlalli Hernández, constantemente recibe insultos por personajes como el millonario Ricardo Salinas, el locutor Pedro Ferriz y su hijo, o incluso, sus propios compañeros en el Congreso, como es el caso de la panista Lily Téllez.
Ellos y otros personajes constantemente mandan mensajes de burla y discriminación a la Senadora por su cuerpo y no tanto por sus ideas.
En Estados Unidos, un locutor de la radio WBAI, Steve Post, decidió organizar un "encuentro gordo" en Central Park, Nueva York porque él, como un hombre de más de 100 kilos, enfrentaba discriminación por tamaño y quería "protestar contra la discriminación contra las personas obesas".
Si bien ha habido cierto debate sobre la intención de Post de organizar un fat-in, lo que está claro es que fue el primer evento de este tipo.
Queremos demostrar que nos sentimos felices, no culpables. Por eso estamos aquí
Esto abrió la puerta a un activismo más radical que se centró intensamente en hacer que el mundo sea más equitativo para las personas gordas.
Sin embargo, la lucha para acabar con este tipo de discriminación no ganó la atención nacional que merecía, pero eso no detuvo a los activistas a favor de la aceptación de la obesidad de traer conciencia.
Dos años después del engorde en Central Park, el escritor Llewelyn Louderback y el activista Bill Fabrey formaron la Asociación Nacional para el Avance de la Aceptación de los Gordos con el objetivo de acabar con los mensajes sobre la fobia a las personas con exceso de peso en los medios y hacer que el mundo sea más seguro para las personas de gran tamaño.