En un triste episodio que deja un vacío en la historia militar de México, el pasado sábado falleció Humberto Gamboa Montoya, maestro y Sargento Primero de Transmisiones retirado, quien ostentaba el título de ser el último integrante del Escuadrón 201 de la Fuerza Aérea Mexicana.
Esta pérdida se suma al luto que embarga a las fuerzas armadas, ya que el jueves pasado también murió el general Rodolfo Reta Trigos.
El último integrante del Batallón 201 de México
Humberto Gamboa Montoya, un hombre de su tiempo y un digno Infante, fue un claro ejemplo de lo que debe ser un Oficial de Infantería. Su legado no solo se limita a su valiosa contribución al Escuadrón 201, sino que, junto con otros militares, participó activamente en la modernización y profesionalización del Ejército Mexicano.
El Escuadrón 201, conocido por sus hazañas y contribuciones significativas a lo largo de los años, ve apagarse una última luz con la partida de Gamboa Montoya. Su servicio y dedicación al país han dejado una marca indeleble en la institución y en la memoria de quienes lo conocieron.
La tristeza se multiplica con la noticia del fallecimiento de Humberto Gamboa, cuyo legado se une al de otros destacados militares que, algunos ya fallecidos y otros viviendo como ejemplos a seguir, dejaron una huella imborrable en la historia militar de México.
Su sacrificio y servicio a la nación serán recordados con respeto y gratitud.
México en la Segunda Guerra Mundial
El Escuadrón 201 formó parte esencial de la Unidad de Combate que participó activamente en los frentes de la Guerra del Pacífico durante la Segunda Guerra Mundial. Este escuadrón fue integrante fundamental de la Fuerza Aérea Expedicionaria Mexicana, liderada por el entonces Coronel Piloto Aviador Antonio Cárdenas Rodríguez.
Operando como parte del Grupo 58/o. de combate de la 5/a. Fuerza Aérea de los Estados Unidos (USAAF), el Escuadrón 201 desempeñó un papel crucial en la liberación de la isla de Luzón, Filipinas, en el verano de 1945. En esta campaña, el escuadrón destacó en operaciones de observación, bombardeos y ametrallamiento contra posiciones japonesas, convoyes de vehículos y emplazamientos de artillería en Filipinas y Formosa.
El Escuadrón 201 ostenta el título de ser el único contingente armado en la historia de México que ha participado en combates en el extranjero, llevando consigo la enseña patria como símbolo de su compromiso. Su misión era defender la causa y el honor de México, buscando la independencia y la igualdad entre los pueblos.
La pérdida de los distinguidos militares que integraron el Escuadrón 201 deja un vacío irreparable en la Fuerza Aérea Mexicana y en el corazón de la patria que siempre recordará su valentía y compromiso.