En otro ataque de tiburón en playas mexicanas, un turista extranjero falleció y una mujer resultó herida en diferentes embestidas, con diferencia de cinco minutos, este jueves en el estado de Guerrero.
Las tragedias ocurriern en Playa Quieta, en Zihuatanejo, al norte de Guerrero, cuando a las 9:15 horas se registró el primer ataque, la afectada fue una mujer de 52 años, de nombre Valerie Haurowitz, originaria de Los Ángeles, California. Ella sufrió una mordida de tiburón, detalló la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil (SGIRyPC), aunque de momento se desconoce la gravedad de su estado de salud.
Personal de la Cruz Roja Mexicana de Zihuatanejo trasladó a la afectada a la Clínica de Cristo Rey, con diagnóstico de heridas múltiples, presuntamente por mordida de un tiburón, aunque otras versiones señalan que podría ser de un cocodrilo.
A las 9:20 horas, cinco minutos después, ocurrió un segundo ataque, un turista de Canadá, de 76 años, murió tras un ataque, presuntamente, por un escualo.
Se trata de Joseph Leopold Luis Bynens, quien estaba siendo ahogando en el ataque; esta persona sufrió la amputación de una pierna tras la mordida del animal; luego de la atención de los paramédicos, el turista falleció a causa del desangrado.
De acuerdo a informes, personal la Cruz Roja mexicana encontró al turista con una pierna amputada “por mordida de tiburón”, en su atención recibió nueve ciclos de resucitación cardio pulmonar (RCP).
Personal de Protección Civil de esa localidad guerrerense afirmó que elementos de la Marina buscan al escualo, aunque no descartan que el ataque puedo haber sido también de un cocodrilo, ya que en la zona hay presencia de estos reptiles.
De acuerdo a las autoridades, este tipo de ataques no suelen producirse en Playa Quieta; de momento, este punto turístico ha sido clausurada por las autoridades.
Este ataque, presuntamente por un tiburón, en playa mexicana, hace recordar la reciente tragedia en una playa del estado de Jalisco, donde una madre murió al salvar a su hijo, ella sufrió una mordedura de tiburón; en aquella ocasión las autoridades confirmaron que no tenían registrado un ataque de este tipo en más de 60 años.