Cuando se trata de tomar una decisión para una de las inversiones más importantes en la vida de cualquier persona, y que en muchos casos se liquida en varias en una o dos décadas, es necesario tener la mejor información para decidir de la mejor manera. Por lo tanto, al momento de adquirir un crédito de hipoteca, hay que tener muy claro lo que ofrece una institución como el Infonavit o algún banco.
En el caso de no contar con el suficiente dinero para pagar de contado para adquirir, el crédito hipotecario es el medio para alcanzar la meta de comprar una casa.
En México, además de un crédito hipotecario con una institución bancaria, también existe la opción de un financiamiento con el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit).
Además, hay una tercera opción, pues el crédito hipotecario también puede ser “mixto”, es decir, un cofinanciamiento entre y el banco elegido y el Infonavit.
La segunda opción es muy recurrida por los trabajadores que cuenta con un empleo formal y, por sus prestaciones de ley, cuanta con aportaciones a la subcuenta del instituto de la vivienda.
Instituciones financieras como el banco BBVA recomiendas hacer este sencillo ejercicio.
Es necesario que tengas muy en claro tu capacidad de pago. Con una simple operación aritmética te podrás dar una idea, a tus ingresos netos mensuales, solo hay que restar tus gastos.
Por ejemplo, si ganas 20,000 pesos al mes y tus gastos ascienden a 5,000 pesos, tienes disponibles 15,000 pesos, tienes una capacidad del 75 por ciento. Conforme vayas agregando compromisos como el pago de algún otro crédito, eso va mermando tu solvencia.
Si tus gastos son alrededor del 40 por ciento de tus ingresos, serás sujeto de un nuevo crédito, explica la institución bancaria.
A considerar
Antes de firmar un contrato hipotecario, con el que te puedes comprometer durante muchos años, tienes que tener muy claras una serie de condiciones, para evitar un dolor de cabeza durante el tiempo que pagues tu crédito.
- Buscar una institución que otorgue una tasa de interés fija y que no haya penalizaciones por pagos o liquidación anticipados.
- Sin importar si vas con el Infonavit o con un banco, debes contar con por lo menos un año de antigüedad en tu trabajo, esto para demostrar que cuentas con un ingreso estable para asumir la deuda.
- Que el instituto o el banco otorgue el crédito en pesos, esto te protege contra devaluaciones o crisis económicas.