Las tormentas en Nuevo León desbordaron arroyos y hasta dejaron a un oso deambulando, mostrando la fuerza de la naturaleza en distintas partes del Estado.
Después de varios meses en sequía, la entidad norteña del México por fin puede ver un poco de calma, dando un giro radical a las condiciones meteorológicas de Nuevo León y presentándose intensas lluvias en varios lugares donde los cuerpos de agua se salieron de su cause.
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Las extremas precipitaciones durante el fin de semana pasado aumentaron su intensidad y ocasionaron que los causes de agua incrementaran su tamaño, poniendo en peligro de muerte a familias enteras en su intento por cruzar el río La Silla en Guadalupe, el cual se desbordó.
Justamente el sábado se llevó a cabo un operativo de rescate por parte de Protección Civil del Estado, donde se rescataron a 10 personas atrapadas en el cause.
Fue en el municipio de Apodaca donde más se registraron las fuertes lluvias, haciendo llegar hasta su límite e incluso sobrepasándolo en lugares como Santa Catarino, Potrero Chico y recientemente el río Topo Chico, donde este lunes se advirtió sobre su desborde.
A pesar de no haberse registrado muertes o heridos relacionados con las tormentas, sí se registraron múltiples daños en varias localidades. De acuerdo con el Gobernador neoleonés, Samuel García, cerca de 95 vehículos quedaron varados en las calles inundadas, además de atenderse más de 700 llamadas de apoyo al 911.
A su vez, las clases para los alumnos del turno matutino fueron suspendidas ante las distintas vialidades encharcadas por el temporal y la salida del arroyo.
Oso deambula por las calles
Las lluvias no solo trajeron agua en exceso, sino también invitados inesperados. En redes sociales se compartió un video donde se aprecia como un oso negro deambula por las calles bajo la intensa tormenta de ayer domingo.
En las imágenes se puede ver como el animal camina tranquilamente sobre una banqueta y posteriormente se dirige a lo que parece ser un estacionamiento.
Las tormentas en Nuevo León dejaron arroyos desbordados y hasta un oso deambulando por las calles, mostrando cómo la naturaleza puede destruir tanto si se presenta en forma de sequía como de lluvias intensas.