En el año 2017 una mujer fue sometida a un tratamiento oncológico, pues se le diagnosticó erróneamente con cáncer. Al recibir el diagnóstico, realizado por un par de expertos en la materia, la mujer pasó por 30 sesiones de quimioterapia innecesarias.
El diagnóstico fue realizado por un par de médicos oncólogos que atienden en el Hospital General de Zona (HGZ) No. 50 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el estado de San Luis Potosí.
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Diagnósticos erróneos
Según los expedientes, la paciente acudió el día 2 en abril de 2017, presentado dolores de espalda, glúteos y piernas, ante esto el personal médico le indicó que se trataba de una contractura, sin que el tratamiento diera efecto, atribuyeron el dolor a "la ciatica" sin hacer los estudios pertinentes.
Cuando sus síntomas empeoraron la mujer fue enviada al área de Ortopedia, en donde los médicos le dieron un terrible diagnostico asegurando que las molestias eran provocadas por un tumor maligno, agresivo y no operable, mismo que le provocaría la muerte en un periodo no mayor a seis meses.
La mujer fue trasladada al HGZ No. 50 en donde se le detectaron tumores de células gigantes de hueso, razón por la que la mujer debería de ser sometida a quimioterapia, puesto que debido a sus características no era candidata a cirugía.
Tras 30 sesiones de quimioterapia recibidas en un periodo de seis meses la paciente no presentaba mejoría, por el contrario cada día estaba más mal. Por este motivo decidió acudir a recibir una segunda opinión.
Segunda opinión
La paciente acudió a un hospital privado, en donde de entero que su tumor no era maligno y que las quimioterapias que recibió habían sido en vano, además de que al no recibir una atención adecuada el tumor incrementó su tamaño, pasando de medir un par de centímetros a pesar 10 kilogramos.
Fue así como la mujer tuvo que ser sometida a una cirugía que le costó 300 mil pesos, misma que dadas las condiciones del tumor, repercutió directamente en su calidad de vida, razón por la cual la mujer acudió a realizar una denuncia ante la CNDH por negligencia medica por parte de la institución.
Ante las acusaciones el IMSS alegó que la paciente abandonó su tratamiento médico y se deslindó de las responsabilidades, ahora la mujer continúa en una batalla legal ante los estragos de un equivocado tratamiento médico.
“De ahí que la pretensión del Instituto de que concluyera su protocolo de estudio posterior a que se le ocasionó una afectación mayor a la que presentaba en sus inicios, resulta insostenible”, sentenció la CNDH