La Copa del Mundo de 2022 es única en muchos sentidos. Es la última Copa del Mundo que contará con 32 equipos antes de que se amplíe en 2026 a 48 cuando se realice en tres países (EEUU., Canadá y México) por primera vez.
Desde la perspectiva de las casas de apuestas el formato actual de 32 equipos significa que cada juego cuenta. A diferencia de otros torneos internacionales con diferentes formatos, cada partido de la fase de grupos es crucial y, en ocasiones, hemos visto grandes equipos, especialmente Francia en 2002, que no se recuperan de una sorpresa en el primer partido.
Catar, un sitio distinto
Celebrado en Qatar, esta es la primera vez que el torneo se lleva a cabo en el Medio Oriente. Qatar es el país más pequeño en albergar la Copa del Mundo en la historia del torneo con solo ocho sedes en cinco ciudades. Más importante aún, esta será la primera vez que la Copa del Mundo se celebre durante el invierno para evitar el calor abrasador de Qatar en junio y julio, cuando las temperaturas pueden superar los 40°C.
Habiendo dicho eso, en Qatar apenas hace frío en noviembre y diciembre, con temperaturas que aún alcanzan los 30° C. Para combatir el calor, todos los estadios están equipados con sistemas de aire acondicionado y se esperan descansos para beber agua en todos los juegos para permitir que los jugadores se hidraten. Para las casas de apuestas deportivas, estos descansos en el juego presentarán sus propios desafíos únicos desde una perspectiva operativa, particularmente en lo que respecta a los mercados en vivo/instantánea y nichos de mercado previos al partido, como la cantidad de tiempo de descuento que habrá en un juego.
De aún más importancia para las casas de apuestas deportivas es el impacto que podría tener una primera Copa del Mundo de invierno en las competiciones nacionales y continentales. Con la Copa del Mundo acercándose a la mitad de la temporada nacional, la Premier League, por ejemplo, comenzó una semana antes de lo normal el 6 de agosto y se interrumpió a mediados de noviembre antes de que comenzara la Copa del Mundo. Esto no solo no deja mucho tiempo de preparación para los jugadores, sino que realmente es un paso hacia lo desconocido para las apuestas deportivas, ya que los operadores intentan tener en cuenta el impacto que podría tener la interrupción del calendario de fútbol tradicional en la actividad general de apuestas y el volumen de negocios.
Un mercado en pleno auge
Los corredores de apuestas de todo el mundo están atentos a las posibilidades que ofrece la Copa del Mundo de Qatar y todos están tomando numerosas medidas para aumentar la visibilidad de sus marcas y generar negocios impresionantes con un crecimiento esperado en la facturación de alrededor del 30% durante el torneo.
La industria de las apuestas deportivas, según estudios de mercado, superó los US $70 mil millones en transacciones financieras en 2021 y se espera que alcance los US $140 mil millones en 2028.
En la fase de grupos, las casas de apuestas estaban realmente en pleno apogeo, con muchos mercados para aprovechar. Pero cuando finalizó esta primera etapa, las partidas más espaciadas acaban propiciando un frenazo en las casas de apuestas deportivas. Por ello, las casas matrices preparan numerosas activaciones para afrontar este retiro.
Un Mundial especial
No cabe la menor duda de que incluso las casas de apuestas se han visto en una situación inusual. Es la primera vez que un Mundial se disputa en plena temporada de fútbol, los equipos se han visto obligados a pararse y realizar mini pretemporadas para afrontar lo que resta de curso. Todo esto hace que las apuestas sean más complicadas puesto que los profesionales están afrontando algo inesperado hasta para ellos mismos. Las apuestas sobre el Mundial también a su vez se vuelven más complicadas puesto que saber en qué forma esto afecta a los jugadores es complicado de descifrar.