De acuerdo con estimaciones del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington, para la mitad de febrero, más del 55 por ciento de la población en México podría infectarse de la variante Ómicron, entre sintomáticos y asintomáticos.
"Esperamos que más del 55% de la población mexicana se infecte con Omicron en las próximas 3-4 semanas", indicó Rafael Lozano, especialista del Instituto.
"Nuestros modelos para México sugieren que las infecciones alcanzarán un pico de alrededor de 3 millones por día para el 19 de enero, aunque los picos en algunos estados variarán considerablemente, con picos posteriores a mediados de febrero en Chiapas y Morelos"
El científico indicó que un infectado puede ser asintomático, y que además en México sólo se hacen pruebas a los que tienen síntomas, por lo que las cifras oficiales serían distintas.
Además indicó que esta alza en los casos afectaría considerablemente a los hospitales, debido al aumento de hospitalizaciones y ausencia de personal infectado que tendrá que ponerse en cuarentena.
"El aumento de hospitales que estimamos incluye admisiones que son incidentales, es decir, personas que llegan al hospital con otros problemas y dan positivo por Covid-19. Sin embargo, habrá presión sobre los hospitales, debido a los pacientes con Covid-19 y la escasez de personal".
El especialista recordó que la variante Ómicron se caracteriza por una mayor fraccion de infecciones asintomáticas y de casos con síntomas leves, así como una fracción menor de casos que requieren hospitalización y una tasa de mortalidad mucho menor, a comparación con la variante Delta.
"Ómicron es 90-99 por ciento menos grave que otras variantes", aseguró el experto.
Actualmente se considera que la variante Ómicron ha causado un aumento en los contagios en diversas entidades de México.