Día Mundial del Whisky, por tal motivo te presentamos la historia de Víctor Patiño, un mexicano que por 10 años ha coleccionado botellas de vino hasta lograr tener casi 900.
Fue en un viaje a Japón cuando decidió iniciar con su compilación de botellas raras, de edición limitada, conmemorativas, entre otras.
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Cada que Víctor agrega una botella a su colección, en realidad compra tres, una para abrirla y beberla, otra para coleccionarla y otra más para venderla.
Con Royal Salute de 38 años, destilería Strathisla en Speyside, Escocia, empezó su colección de forma en serio.
Dce que muchas de las botellas que tiene son esenciales y que es divicil decidirse por una ya que si son parte de su colección es por un motivo importante.
Entre sus botellas de whisky está la Kavalan 40 aniversario, es un whisky taiwanés importante por la gran fuerza que ha cobrado en estos últimos años, el Hibiki japonés de 30 años edición limitada muy difícil de conseguir.
Víctor es fundador de Bottle & Brothers. Un club de whiskey con 205 personas. Mediante la membresía del club de whisky Bottle & Brothers, podrás recibir tres o cuatro botellas por mes con planes de 6 ó 12 meses.
¿Cómo se toma el whisky?
La forma más sencilla de disfrutar de un whisky es tomándolo solo. Muchos whiskeys se ven muy mejorados con hielo o con agua.
Pero si no estás acostumbrado a esta forma de beberlo, puede ser muy fuerte.
Para hacer la experiencia más suave, puedes probar a añadirle agua o hielo.
La elección del vaso: Si vas a beber el whisky solo con agua o con hielo, la mejor elección es un buen vaso corto con un fondo pesado.
Con agua
Esta opción también es muy buena, suavizando el whisky soloa añadiéndole unas gotas de agua para ayudar a abrir los sabores a medida que los líquidos se combinan.
La explicación técnica es que el agua libera los elementos hidrofóbicos (repelentes al agua) del vaso, permitiendo detectar más aromas y, al disminuir el contenido de alcohol, más sabores.
Con Hielo
Añadir hielo al whisky hace que la experiencia sea más refrescante, pero también puede cambiar significativamente el sabor al diluir el whisky, igual que ocurre cuando lo tomamos con agua.
Al enfriar el whisky podemos silenciar algunos sabores y mejorar otros. El hielo adormece tu paladar y embota los sabores, pero a veces simplemente te apetece un whisky frío.