HISTORIAS DE LA FRONTERA

Cuando en Parras, Coahuila, ya se iluminaban con focos, en Nueva York y Londres aún usaban antorchas

Un acontecimiento pionero ocurrido en esta población del norte de México, transformó para siempre la historia energética del continente. La visita de Edison a la familia Madero detonó un suceso que antecedió a las mejores metrópolis del mundo

¿Qué relación tuvo Parras con Edison?
¿Qué relación tuvo Parras con Edison?Créditos: Internet | El Mañana
Escrito en LAREDO TEXAS el

"La Bombilla de Parras" es un referente histórico que posicionó a este municipio coahuilense como el primer punto de América Latina donde una lámpara eléctrica funcionó plenamente.

Esta proeza, fruto de la colaboración entre el innovador Thomas Alva Edison y el empresario Evaristo Madero, marcó el inicio de una nueva etapa para la región y sentó las bases de un cambio tecnológico fundamental.

'La bombilla de Parras'

El episodio ocurrió en marzo de 1880, cuando Edison viajó a Parras para encontrarse con Madero, uno de los principales impulsores de sus investigaciones. En la antigua Hacienda del Rosario, actual Estanque de la Luz instalaron una pequeña turbina hidráulica asociada a un afluente subterráneo.

Ese mecanismo generó la energía suficiente para encender una serie de lámparas incandescentes, un logro que superó a los centros urbanos que todavía dependían de lámparas de aceite o candelas.

Este acontecimiento, poco difundido durante décadas, consolidó una alianza estratégica entre ambos personajes. Madero, quien ya destacaba por su visión empresarial fronteriza, encontró en la naciente electricidad una oportunidad trascendental.

Su apoyo financiero a Edison permitió acelerar el perfeccionamiento de la bombilla y propició que ese avance llegara a México antes que a otras naciones del continente.

El hecho no sólo simbolizó el arribo de la modernidad a un valle rodeado de viñedos, sino que colocó a Parras como escenario de un experimento que cambiaría la vida cotidiana en todo el hemisferio.

A partir de esa demostración, los descendientes de la familia Madero continuarían vinculados con el desarrollo científico, algunos incluso estudiando bajo la guía intelectual del propio Edison.

Hoy, más de un siglo después, la antigua hacienda ha sido adaptada como espacio histórico y enológico que honra aquel momento en que la "bombilla de Parras" abrió paso a la era eléctrica en el mundo.