Traficaban niños menores a cinco años de nacidos, a los pequeños indocumentados los sedaban con gomitas de melatonina para cruzarlos “dormidos” por el puente internacional, hay 6 arrestados, 5 de apellido Bryand.
La melatonina es una hormona producida por el cuerpo, regula los ciclos de día y noche o los periodos de sueño-vigilia.
Vanessa Valadez, laredense de 23 años es la última de los que han sido arrestados y que ya se declararon culpables en este caso de tráfico de indocumentados, o de niños sin documentos para ingresar a Estados Unidos, usaban documentos migratorios apócrifos o ajenos a las criaturas, para traerlos a Estados Unidos.
Ana Laura Bryand, de 47 años de edad, residente de Dallas, Texas, su sobrina Kayla Marie Bryand, de 20 años, de Laredo; José Eduardo Bryand, laredense de 43 años; Nancy Guadalupe Bryand, de 44, también de esta frontera; así como Lizeth Esmeralda Bryand Arredondo, de 32, mexicana, son los ya detenidos y declarados confesos.
Para que no fueran interrogados por los agentes migratorios de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en el cruces binacional “Juárez-Lincoln”, escogido para tales acciones, les daban gomitas de melatonina .
Los malos tiempos para esta banda de traficantes, empezó hace 13 meses, en agosto del 2023, dijo Alamdar S. Hamdani, Fiscal Federal del Sur de Texas.
Al menos cruzaron con éxito a otras cuatro niñas, de las que no se sabe su destino, se ignora dónde están.
El 21 de septiembre del año pasado un miembro del clan cayó en el puente “Juárez-Lincoln”, conseguían actas de nacimiento norteamericanas que los ligaban a los adultos y a cada niño sedado, como si fueran familiares entre sí.
“La noqueamos con unas gomitas”, dijo uno de los traficantes, según mensajes de textos recabados por las autoridades federales.
La juez federal laredense, Marina García Marmolejo dictará sentencia el 8 de enero próximo, podrían alcanzar cada uno de los acusados, hasta 10 años de prisión.
CBP, Investigaciones de Seguridad Interna (HSI) el FBI, Patrulla Fronteriza, el Departamento de Servicios Humanos y de Salud de Estados Unidos y la Policía Municipal de Laredo, llevaron a cabo las investigaciones del caso.