Jesús Martínez, estudiante de tercer grado de la Escuela de Comunicaciones y Bellas Artes Vidal M. Treviño y de la preparatoria Martin, fue aceptado en el prestigioso y mundialmente reconocido Programa de Residencia del Centro Interlochen para las Artes para su último año de prepa.
De los 81 mil dólares de matrícula, Martínez recibió alrededor de 40 mil a través de ayuda financiera y una beca basada en el mérito académico, para asistir a su último año de preparatoria en Interlochen, en una actuación clásica en tuba a partir del otoño de 2024.
“Cuando me enteré de que me habían admitido en Interlochen fue muy surrealista. Es la mejor escuela privada del país de música y bellas artes. Miles y miles de estudiantes audicionan cada año y este año fui uno de los pocos que fueron aceptados. Entonces, es un logro tan grande para mí que realmente no me di cuenta de lo que había hecho hasta un par de semanas después. Todavía se está asimilando lentamente”, comentó Martínez.
Mientras asiste a Interlochen, espera aprovechar esta oportunidad para perfeccionar sus habilidades y prepararse para el futuro. “Espero convertirme en un mejor músico porque sé que el instructor que hay allí es probablemente el mejor del país. Sólo espero poder sacarle mucho provecho. Lo principal es que quiero que me acepten en una gran universidad. Espero llegar al Conservatorio y sé que Interlochen es uno de los programas que me ayudará a lograrlo”, manifestó.
Jesús conoció Interlochen a través de uno de sus amigos cercanos que asistió a uno de sus campamentos de verano. “Regresó de ese campamento y estaba 10 veces mejor que cuando se fue. Tal como se comportaba él mismo. Sus gestos, su forma de hablar y todo parecía estar en un nivel elevado. Eso es lo que me motivó a querer asistir a Interlochen”, contó. Martínez, quien ejecuta la tuba desde sexto grado, poco a poco encontró su pasión y amor por este instrumento cuando ingresó a la preparatoria.
“Se ha dicho que la tuba no es realmente un instrumento que buscas, es más bien un instrumento que te encuentra. Al igual que todos los músicos que he conocido, nadie ha empezado a tocar la tuba. En cierto modo se vieron obligados a hacerlo o era su última opción”, añadió el joven. Entre los educadores y mentores que han apoyado a Martínez en sus sueños se encuentran John Reimund, instructor de VMT Low Brass y sus instructores de banda en Martin High School.