Se está eligiendo entre más de 200 residentes locales al jurado que decidirá dentro de poco más de un mes, el 26 de junio, sí es culpable o inocente el entonces Supervisor de la Patrulla Fronteriza, Ronald Anthony Burgos Avilés acusado de acuchillar a Grizelda Hernández y al hijo de ambos, el bebe Dominik Alexander de 18 meses, ocurrido el 8 de abril del 20218.
Desde la primera semana de este mes, las partes, o sea la defensa del acusado y la Fiscalía de Distrito del Condado de Webb, en la gran sala del palacio de justicia, han estado seleccionando a los miembros de dicho jurado, entrevistando a siete personas cada día de la semana hábil.
Te podría interesar
Las partes van rechazando a muchos y aceptando a pocos como posibles miembros del jurado, los que deberán ser 14, es decir, 12 titulares y dos suplentes y quedar decididos antes del 26 de junio.
Ellos fungirán como miembros del tribunal civil que decidirán la culpabilidad o inocencia de Burgos Avilés, señalado de dar muerte a la joven con quien sostuvo una relación sentimental extramarital -él es casado- y de esta, la pareja tuvo un bebito (Dominik).
Se supone que Burgos les quitó la vida a navajazos, cadáveres hallados a la orilla del río Grande, cerca del crucero de Bristol y Allen, colonia Dellwood Park, en el área del Camino A Las Minas, los cuerpos fueron descubiertos la mañana del lunes 9 de abril del año 2018.
El Fiscal de Distrito del Condado de Webb Isidro Alanís, buscará la pena de muerte mediante inyección letal para el boricua agente federal, luego de que Alanís, lograse que el juicio no fuera trasladado a San Antonio, Texas, como quería la defensa de Burgos.
El agente federal será juzgado en la corte de distrito número 49, a cargo del juez Joe López.
“La familia de las víctimas me pidieron en que solicite la pena de muerte mediante inyección letal para Burgos Avilés”, dijo el Agente del Ministerio Público del Estado, Isidro Alanís.
este mismo jueves, día del fallo contra la defensa del acusado.
Se supone que el federal los mató, ya que a él le fueron encontrados los teléfonos celulares del propio Burgos y de Marizela Hernández, discutiendo sobre la relación de ambos, del reconocimiento paternal hacia el pequeñín y de la manutención del mismo.
El propio Burgos Avilés, fue quien denunció el hallazgo de los cuerpos, supuestamente él encontró los cadáveres en una zona de terracería y pastizal a la orilla del afluente, un área la cual él a diario patrullaba o supervisaba para la Patrulla Fronteriza.