En una sola caja tráiler fueron hallados 145 indocumentados en la garita de la milla 29 de Laredo, sobre la carretera interestatal 35, el trailero tiene 73 años; otro chofer fue sentenciado a dos años de cárcel, porque en el mismo punto de revisión le encontraron 95 extranjeros ocultos en su remolque. Anthony Alfred Boring, conductor de un “18 Ruedas”, residente de Houston Texas, le dijo a los agentes de la Patrulla Fronteriza “no lo sé”, cuando le preguntaron qué es lo que transportaba.
Y este martes 28 de junio, Boring aceptó su culpa y entró en tratos con la Fiscalía Federal de Estados Unidos, representada en el Sureste de Texas por Jennuifer B. Lowery. Ante el juez federal, el septuagenario aceptó que llevaba a 86 mexicanos, 49 de Guatemala, 5 de Honduras, 3 de El Salvador y 2 de Ecuador, fue el 15 de abril pasado, pero ahora lo presentaron ante el juzgador de su caso, para aceptar la culpabilidad y poder negociar un castigo no tan severo para él.
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Con su camión estiraba un remolque cerrado desde el exterior, tal y como en el que acaban de morir 51 indocumentados este lunes, a la entrada de San Antonio, Texas, procedentes de Laredo.
La Patrulla Fronteriza en su reporte dijo, que el hombre entró en shock, se puso pálido, encogió los hombros, se sumió en el asiento del chofer y con ojos vidriosos dijo no saber lo que llevaba en la caja seca cerrada. Uno de los indocumentados declaró que hacía mucho calor dentro, que iba muy llena de gente la caja remolque y que no llevaban agua para beber. Según el Código Penal Federal, hasta 20 años de cárcel y multa de 250 mil dólares podrían ser los castigos para Boring.
SENTENCIA
Dedrick Lindell Coleman, de 49 años de edad, trailero residente de la ciudad de DeSoto, Texas, justo en el sur de Dallas, mismo condado, sobre la carretera interestatal 35, fue condenado este martes 28 de junio a dos años de cárcel por tráfico de indocumentados. A Coleman, el 14 de enero le hallaron 95 extranjeros ocultos en el remolque o caja tráiler, cuando llegó a la garita federal de la milla 29 carretera interestatal 35, milla 29, al norte de Laredo. El 14 de abril, este chofer aceptó su culpabilidad ante la jueza federal laredense Marina García-Marmolejo.
El tipo tiene historial criminal antes de este tráfico de humanos. Los canes adiestrados (K9) de la Patrulla Fronteriza avisaron a los agentes federales de la posible presencia de humanos al interior de la caja seca o contenedor estirado por el camión que manejaba Dedrick Lindell.