El pasado 15 de mayo, dos pescadores de Texas estaban a punto de terminar su día de pesca en un pantano del sureste de Texas cuando vieron un pez que nunca antes habían visto. Un raro catán negro gigante.
Justin Jordan, el propietario de Lotus Guide Service, que había oído hablar de esa especie de catán antes, pero se sorprendió al verlo en persona.
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Catán negro gigante
Dijo que él y su amigo, Terrell Maguire, atraparon al animal de más de metro y medio con una carnada parecida a un cangrejo llamada "spork", hecha por su amigo y compañero capitán, Collin Scoville.
"El pez lo comió de alguna manera. Lo enganchó y comenzó a saltar fuera del agua volviéndose loco".
Después de una breve pelea de 10 minutos entre el catán y los pescadores, la pareja pudo medir el enorme pez-lagarto y tomarle fotos. Luego, los pescadores lo devolvieron al agua.
Los catanes, llamados también peces lagartos o pejelagartos, son típicamente de color oliva. No se sabe exactamente qué tan común es el melanismo (color oscuro) en la naturaleza, pero se considera que es un trastorno genético raro.
El melanismo es distinto del albinismo, que es la falta total de pigmentación, y del leucismo, que conduce a una pigmentación reducida.
"Sabía que era un caimán melanístico, pero nunca antes había visto uno. Ni siquiera nos dimos cuenta de lo raro que era en el momento en que lo atrapamos".
Rara vez se ven o se detectan ejemplares melanísticos, cuya piel contiene un nivel anormalmente alto de un pigmento llamado melanina.
El catán es una de las especies más grandes de Texas y el norte de México. La especie puede crecer incluso hasta 3 metros y pesar cerca de 150 kilos, lo que los convierte en uno de los peces de agua dulce con mayores dimensiones de América del Norte, solo superado por el esturión blanco.
Los parientes prehistóricos del caimán aparecieron por primera vez hace unos 157 millones de años. Hoy en día, estos peces habitan principalmente en las aguas del sureste de los EE. UU. y Texas.
Aunque pueden parecer feroces, no representan una amenaza para los humanos y hasta la fecha no se conocen ataques contra personas.
El catán negro gigante nada nuevamente por los pantanos de los márgenes del Río Bravo, al ser liberado por los pescadores.