El lunes, más de 50 indocumentados fueron asegurados en dos casas de Laredo; la cifra va en aumento, como la temperatura y las probabilidades de proliferación de enfermedades, con tantas personas hacinadas, indicó la Patrulla Fronteriza.
“Se trabaja con todas las agencias de la ley, sean federales, estatales, del condado y de la ciudad, para mantener la frontera a salvo. El 13 de junio hallamos dos viviendas atestadas de extranjeros sin documentos migratorios, conviviendo en reducidos espacios, propensos a enfermarse mediante contagio, si alguien padece de un mal”, dijo Carl E. Landrum, jefe de la Patrulla Fronteriza Sector Laredo.
Enfatizó que los males de salud son una amenaza más para los norteamericanos, con personas arribando de todo el mundo, que pudiesen estar contagiadas de enfermedades aún no manifestadas; la frontera estadounidense está más expuesta, pues es donde se aglutina a los indocumentados, que buscan cruzar.
Campos de cultivo de enfermedades son esas viviendas, con 50 personas y más, compartiendo el uso de una sola taza de baño.