Par de fallecidos en menos de una semana ocurrieron este fin del verano, así como 13 llamadas al sistema de emergencia “911” clamando rescate para un total de 34 personas extraviadas.
Sólo que de ellos dos murieron, informó la Patrulla Fronteriza.
Los indocumentados perdidos en despoblado van en aumento, antes del cierre de verano se dieron estos decesos.
Y las cifras de llamados de socorro se han disparado, como también el aumento considerablemente del tráfico y la travesía de esta gente de tal manera, entre ranchos, en el monte para tratar de bordear las garitas de inspección instaladas en las carreteras que convergen con Laredo.
Extranjeros en sitios muy difíciles, con accidentes de terreno, sin árboles o zonas sombreadas para cubrirse del sol.
Caminan sin agua, sin alimento, algunos muy débiles o se les agudizan las enfermedades crónicas que ya tienen.