LAREDO, Texas.- Con todos los honores militares, el cabo de la Marina de Estados Unidos, David Lee Espinoza fue sepultado ayer en el cementerio municipal.
Acompañado de sus padres Elizabeth Holguín y Víctor Domínguez además de sus hermanos, la ceremonia del funeral fue triste pero al mismo tiempo llena de honores y detalles propios de un héroe.
Espinoza, de 20 años, murió el pasado 26 de agosto en Kabul, Afganistán luego de un atentado terrorista en el aeropuerto, junto con 12 compañeros más.
El joven residente de Río Bravo tenía poco más de dos años de pertenecer a la Marina de Estados Unidos ya que su sueño era ser precisamente eso….un Marine.
El cuerpo fue velado dos días y este lunes llevado a la iglesia San Patricia donde el obispo James Tamayo ofició una misa especial de cuerpo presente para luego ser transportado a la Preparatoria LBJ, su alma mater, para una procesión especial.
Acto seguido fue escoltado hasta el cementerio municipal donde compañeros de la Marina se encargaron de sepultarlo con todos los honores militares, incluida la entrega de la medalla de Corazón Púrpura a su madre, por haber muerto en el cumplimiento de su deber.
En sus funerales estuvieron cientos de personas entre familiares, amigos, maestros, oficiales públicos, elementos militares y residentes locales que acudieron para rendir tributo al joven Marine y despedirlo en su última morada.
Descanse en paz el cabo David Lee Espinoza... ¡¡Siempre Fiel!!