Con los meses más calientes del año encima, las autoridades advirtieron sobre el peligro de dejar a niños y mascotas encerradas en los vehículos porque corren el riesgo de morir por un colapso de calor.
“Además de peligrosa, esta acción es un delito en grado de felonía y quienes lo hagan pueden ir a parar a la cárcel”, advirtió Joe Baeza, vocero en el Departamento de Policía.
Refirió que muchas personas dejan a niños o mascotas en sus vehículos mientras bajan para hacer una compra o cargar gasolina.
“En el interior de los vehículos la temperatura sube mucho más que en el exterior y esto puede matar a un niño en cuestión de minutos”, señaló.
Pidió a las personas estar atentas en supermercados y centros comerciales y si ven niños o mascotas encerradas en vehículos, deben llamar de inmediato al sistema de emergencia 911.
Por su parte, el juez de Paz Oscar Liendo mantiene una campaña para que los padres hagan conciencia sobre el peligro de dejar a sus niños encerrados en los autos porque corren el riesgo de un golpe de calor.
“Dejar a un niño encerrado en el auto aunque sean por un par de minutos no solamente es peligroso sino que además es contra la ley, una persona puede ser llevada a la cárcel si un oficial detecta esta situación”, advirtió el juez Liendo.
Agregó que si bien parece increíble que los padres descuiden a sus hijos, cada año se registran en promedio 39 muertes en Estados Unidos a causa del descuido de adultos al dejar a los menores encerrados en autos.
“Afuera puede estar a 100 grados pero en el interior de un vehículo la temperatura puede subir a más de 125 grados en unos minutos y esto es mortal para un niño”, dijo el funcionario.
Los estudios indican que el 80% del aumento de temperatura ocurre en los primeros 10 minutos y abrir un poco las ventanas no ayuda a disminuir el proceso de calentamiento.
TABLA PELIGRO
*El cuerpo de un niño se calienta de 3a5 veces más rápido que el de un adulto.
*Los asientos infantiles instalados mirando hacia atrás NO muestran si un bebé lo está ocupando, o no.
*Los niños, especialmente los bebés, a menudo se quedan dormidos en sus asientos de seguridad orientados hacia atrás; se quedan calladitos y se convierten en pequeños pasajeros que no se notan.
*Convierta en hábito el abrir las puertas traseras para asegurarse de que nadie quede encerrado.
*Para reforzar este hábito, coloque un artículo que le sea imprescindible en el asiento trasero: su tarjeta de identificación de empleado, su computadora portátil, su teléfono, su bolso, etc.
*Pídale a su proveedor de cuidado infantil que lo llame de inmediato si su hijo no ha llegado a la hora programada.